Por muchos años trabajadores y pacientes han contando un sin número de relatos que pasan en los hospitales, pues aseguran que los espíritus de algunas de las personas que ahí mueren, penan por los pasillos.
Tal es el caso de la enfermera del hospital del ISSSTE en Gómez Palacio, de la que dicen murió hace muchos años a causa de un paro cardíaco en el elevador.
Según cuentan enfermeras, camilleros, empleados de la cocina, así como pacientes, les platica de su trabajo y al llegar al piso seleccionado, les pide que vayan a buscar a la encargada de la oficina de urgencias y lleven su recado de que la espera en la planta baja de la puerta principal.
En una ocasión uno de los guardias acompañó a una mujer que fue a visitar a una de sus hermanas que estaba internada en la cama 206.
Era la primera vez que iba al hospital, por eso el guardia la acompañó, subieron el elevador cuando la mujer empezó a platicar, dirigiéndose a una de las esquinas, por lo que asombrado el hombre solo escuchaba que hablaba sobre su hermana y el estado de salud en el que se encontraba.
Al llegar al piso, descendieron del elevador, no sin antes la mujer se despidió, al salir le dice al guardia sobre la amabilidad de la enfermera, a lo que él responde:
¿Cuál enfermera?, si en el elevador sólo se encontraban los dos.
La mujer aseguraba haber estado acompañada de una persona, quien le pidió que fuera al área de urgencias a decirle a la encargada que la esperaba en la farmacia para entregarle la medicina de su área.
Trabajadores del lugar comentan que después de lo sucedido, el guardia pidió su cambio de turno.
Muchos de ellos aseguraron haber tenido esa misma experiencia, por lo que evitan usar el elevador por temor a encontrarse con el fantasma de la enfermera.