Una investigación geofísica de alto nivel ha proporcionado pruebas concluyentes de que no existen cámaras ocultas adyacentes o dentro de la tumba del faraón Tutankamón, en Egipto.
Es el resultado de los estudios y análisis de radar de penetración terrestre recogidos en febrero desde el interior de la tumba, que han sido presentados ahora en la IV Conferencia Internacional sobre Tutankamón. Se zanja la controversia de que la tumba de la reina Nefertiti se encontrase junto a la de Tuntankamón.
El informe científico ha sido realizado por un equipo liderado por Francesco Porcelli de la Universidad Politécnica de Turín. Se ha presentado al comité permanente de antigüedades egipcias en el Ministerio de Antigüedades de Egipto con todos los resultados de los análisis de datos del radar.
Según Porcelli, el estudio demuestra que no hay discontinuidades marcadas debido al paso de roca natural a paredes de bloqueo hechas por el hombre, y no hay ninguna prueba de jambas o el dintel de una puerta. Del mismo modo, los ecos de radar no muestran ninguna indicación que pudiera ser interpretada como paredes de una cámara o zonas sin espacio detrás de las pinturas de la cámara funeraria.
"Se concluye, con un alto grado de confianza, que la hipótesis relativa a la existencia de cámaras ocultas o corredores adyacentes a la tumba de Tutankamón no está respaldada por los datos del radar de penetración terrestre", declaró Porcelli, según informa el Ministerio de Antigüedades de Egipto.
El estudio fue realizado para poner fin a la controversia después de resultados contradictorios de dos estudios anteriores de radar llevados a cabo por un equipo científico japonés y estadounidense, para corroborar una teoría lanzada en 2015 por el egiptólogo británico Nicholas Reeves que sugirió que la tumba de la reina Nefertiti estaba oculta detrás de las pinturas de los muros norte y oeste de la cámara funeraria de Tutankamón.
FM