Furias: Medea, mi madre y yo es una obra interdisciplinaria que mezcla teatro, danza y performance para revisitar el mito de Medea desde la perspectiva del linaje materno y las heridas personales. En la puesta se invoca a las Furias, figuras griegas ancestrales con las que exploraremos la maternidad como deseo, maldición y campo de batalla.
La puesta, que cuenta con dramaturgia y dirección de Itzhel Razo; coreografía de Razo y Azhareel Sierra; y las interpretaciones de Elisa Romero, Michele Ferrer, Patricia Rivera y la propia Razo, es la segunda parte del díptico Yo fémina, un acto escénico de memoria, resistencia y sanación, que busca desentrañar lo más oscuro y pasional del universo femenino. Conversamos con Itzhel Razo sobre la obra:
— Primero ¿puedes platicar lo que es el díptico?
El díptico se llama Yo, femina, yo mujer, en el cual exploro entre otras cosas preguntas relacionadas al ser mujer: qué mitos nos hemos contado nosotras mismas, qué mitos nos ha contado la sociedad, la familia, de dónde viene la energía femenina. La primera parte se llama Carne de cañón, una obra que estrené en diciembre del año pasado y ahora viene la segunda entrega, en donde me adentro más a detalle en el tema de la maternidad tomando como punto de partida la madre más cancelada de toda la historia de Occidente, que es Medea. Medea es un personaje al cual nunca se le ha dado una redención, porque si bien es la maga, si bien es la chamana, si bien es la medicina, también representa a la mujer que comete el crimen imperdonable de asesinar a sus hijos.
— Sabemos que uno de los monólogos más impresionantes es el de Eurípides, ¿tú cómo ahondas en esa cuestión?
Para empezar, Eurípides era hombre y muchos personajes femeninos han sido escritos por hombres, que a nosotras las mujeres nos representan pero no del todo. Esta versión la escribe y la reconstruye una mujer tratando de entender lo que es una madre como Medea. En el mito ella mata por celos, pero en realidad hay muchas madres Medeas contemporáneas: es una madre egoísta, que solo tiene ojos para ella misma y que ve a sus hijos como una extensión de sí misma. El punto de partida de la obra es el de la hija, qué es ser hija de una Medea y cómo eso reconstruye tu relación con el mundo y te hace creer que estás en un campo de batalla. Se tiene la visión de que el hijo te pertenece; hay muchas madres mantis. Aquí, tenemos una Medea desde diferentes aristas, más identificada con lo que a nosotras nos pasa como mujeres.
¿Cuánto y dónde?
Furias: Medea, mi madre y yo, segunda parte del díptico Yo fémina, podrá verse del martes 16 al viernes 19 a las 20:00; el sábado 20 a las 19:00; y el domingo 21 de diciembre a las 18:00 horas en el Teatro Benito Juárez. El costo del boleto es de 204 pesos y puede adquirirse en taquilla o a través del sistema Ticketmaster.
AMS