El hijo de García Márquez narra los últimos días de sus padres en un libro

Gabo y Mercedes. Una despedida incluye anécdotas familiares y pasajes no tan conocidos de la vida del escritor colombiano y la de su esposa.

El autor de 'Cien años de soledad' con su esposa, Mercedes Barcha Pardo. (Cortesía: Rodrigo García Barcha)
Rodrigo Hernández López
Ciudad de México /

Rodrigo García Barcha nunca imaginó escribir sobre la muerte de sus padres. Y mucho menos pensó que esos escritos se publicarían. Ahora, los lectores en todo el mundo podrán descubrir cómo fueron las últimas tres semanas de vida de Gabriel García Márquez.

El libro Gabo y Mercedes. Una despedida, publicado por Penguin Random House, es la crónica de los últimos días del Nobel de Literatura, quien falleció en 2014 y de los de su esposa Mercedes Barcha Pardo fallecida en 2020.

La narración de la muerte de Úrsula Iguarán y del coronel Aureliano Buendía son dos de los momentos cumbre de Cien años de soledad, por eso algo que le dolía al Gabo, era no escribir sobre su muerte.

“No escribí sobre su experiencia (con la muerte), eso lo estará escribiendo él ahorita en algún lugar”, dijo García Barcha en una conferencia de prensa virtual para presentar su libro.

"Nadie escribe por otro escritor, pero me apoyé un poquito en esa idea para consolarme a mí mismo de escribir sobre su muerte sin que fuera de una manera demasiado indiscreta”, aseguró el cineasta.

Al preguntarle que su padre se inspiró en la historia de amor de sus abuelos, para escribir El amor en los tiempos del cólera, y sobre si en algún punto se había planteado hacer lo mismo con la historia de sus padres afirmó: “Nunca tuve la intención… después de escribirlo, nunca pensé que lo iba a editar”.

El libro incluye anécdotas familiares, pasajes no tan conocidos de la vida de un hombre que fue tan público como fue posible. Durante la reunión habló de la adaptación para Netflix de la obra cumbre del realismo mágico, de la que ya se está trabajando en los guiones, además reveló que la casa en México donde murió el escritor será convertida en un museo, pero aún trabaja, junto a su hermano Gonzalo, en los detalles para poder llevarlo a cabo.

Ahora, como los personajes de sus novelas, Gabriel y Mercedes “vivirán” por siempre, mientras existan lectores que lean sobre sus últimos días. Aunque esto signifique lo que Rodrigo llama “la disolución del club de los cuatro”.

PCL

LAS MÁS VISTAS