Fallece la autora infantil Beverly Cleary a los 104 años. ¿Quién era y qué hizo?

Beverly Cleary escribió más de 30 títulos que han vendido más de 85 millones de copias alrededor del mundo a lo largo de 5 décadas.

Beverly Cleary firmando libros en Monterey, California. Abril de 1998. (AP)
California, Estados Unidos /

Beverly Cleary, la reconocida autora de libros para niños, falleció este jueves a los 104 años de edad en su casa de Carmel, California, según informó la editorial Harper Collins. No se reveló la causa.

Era famosa por escribir libros que los niños realmente querían leer. Sus obras como “Henry Huggins” y la saga de Ramona Quimby son referencia colectiva de la niñez de muchos baby boomers y miembros de otras generaciones.

¿QUÉ HIZO? - SU CARRERA

Beverly Cleary escribió más de 30 títulos a lo largo de 5 décadas. Hasta el momento se han vendido más de 85 millones de copias de ellos alrededor del mundo.

Con la publicación de su primer libro, “Henry Huggins” en 1950, Cleary empezó a dar paso a una nueva era de historias realistas para los más jóvenes, que estaban acostumbrados a cuentos de moral o a “leer sobre niños en Inglaterra”, como ella misma dijo alguna vez.

Cleary inventó a uno de sus personajes más populares, la energética y traviesa Ramona Quimby, en 1955 después de darse cuenta de que casi siempre escribía sobre hijos únicos y que era momento de escribir sobre alguien con hermanos. Como su trabajo en general, los libros sobre Ramona eran creíbles, pero hacían reír.


La autora creó ocho libros que giraban en torno a esta heroína imperfecta. Dos de ellos, “Ramona and Her Father” y “Ramona Quimby, Age 8” obtuvieron menciones honorarias en la competencia por la Medalla Newbery, el premio más importante de la literatura infantil. En 2010 la saga de libros fue convertida en una película llamada “Ramona and Beezus”.

En 1984 Cleary ganó la Medalla Newbery por un libro que se alejaba un poco de su trabajo usualmente ligero llamado “Dear Mr. Henshaw”. En él contaba la historia de un niño de 10 años que se manda correspondencia con un famoso autor mientras sus padres se divorcian. A pesar del tema serio, seguía siendo evidente el tono juguetón que la caracterizaba.

Hace más de 10 años, la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos declaró a Cleary una leyenda viviente y su cumpleaños, el 12 de abril, se celebra como el Drop Evertything and Read Day, es decir el Día de Dejar Todo y Leer en español, en bibliotecas y escuelas alrededor de Estados Unidos.

¿QUIÉN ERA? - SU VIDA

Beverly Atlee Bunn, cuyo nombre cambió años después a Beverly Cleary, nació el 12 de abril de 1916 en la granja de 32 hectáreas de su familia cerca de McMinnville, Oregon. Era hija única.

Tiempos difíciles obligaron a sus padres, Chester y Mable Bunn, a vender la propiedad y mudarse a Portland cuando ella tenía 6 años. Su padre terminó tomando un trabajo en un banco.

“La pasé mal en la escuela en primer grado,” le dijo Cleary a The Times en 2011. En la granja ella era “libre y salvaje” y fue un shock “ser callada en un salón”. No ayudaba que su maestra en ese momento le parecía “increíblemente tonta”.

En tercer grado, Cleary descubrió “The Dutch Twins” de Lucy Fitch Perkins y desde ese momento se enamoró de la lectura. Para una tarea de sexto año sobre su personaje literario favorito, Cleary escribió sobre una niña que visitaba Bookland (La Tierra de los Libros) y hablaba con varias figuras famosas.

“Una sensación de paz me invadió conforme escribía mucho más allá de la extensión requerida,” recordó Cleary en “A Girl From Yamhill” uno de sus dos libros de memorias. “Había descubierto el placer de escribir.”

“La maestra me dijo que cuando creciera, debería escribir libros para niños,” dijo en entrevista con The Times en 2011. “Así que guardé eso en el fondo de mi mente.”

Su madre le sugirió que tuviera otro trabajo que le pudiera dar un ingreso fijo mientras perseguía su sueño de escribir así que Cleary decidió volverse bibliotecaria.

Durante la Gran Depresión, su padre perdió su trabajo y ella tuvo que pagarse la universidad, Chaffey College en Ontario, arreglando faldas y diversas prendas de sus compañeras de clase. Eventualmente se cambió a la Universidad de California en Berkeley y obtuvo su título en Inglés en 1938.

Conoció a su futuro esposo, Clarence Cleary, en un baile de la escuela. Él era un contador y compañero estudiante seis años mayor que ella. Se casaron en 1940.

Beverly se mudó a Seattle con la intención de estudiar para convertirse en bibliotecaria infantil en la Universidad de Washington y se graduó en 1939. Poco después fue contratada por la biblioteca pública de la ciudad de Yakima donde un día “Un pequeño niño sucio” le preguntó: “¿Dónde están los libros sobre niños como nosotros?”, cuestionamiento que se le quedó marcado.

Durante la Segunda Guerra Mundial, Cleary trabajó como bibliotecaria en una base militar de Oakland.

En 1948 ella y su esposo se establecieron en una pequeña casa en Berkeley Hills, donde se encontró un viejo paquete de papel sin usar en un closet. Cleary lo vio como una señal de que debía empezar a escribir, según contó en sus memorias.

En 1955 tuvo gemelos, Marianne y Malcolm, quienes eventualmente enriquecieron su escritura con las historias que traían a casa de la escuela.

El objetivo de Cleary era escribir “libros humorísticos” que “hicieron que los niños quisieran leer”.

Su esposo falleció en 2004, pero le sobreviven sus dos hijos, tres nietos y un bisnieto.

pmm

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