Algunos poetas escriben con sangre. Salvador Novo escribe con caca. Es una de las icónicas frases de Octavio Paz al referirse al autor de Las aves en la poesía castellana.
La homosexualidad y la sátira son el hilo conductor de Luis Felipe Fabre en Escribir con caca (Sexto Piso, 2017), en donde interpreta los versos escatológicos de Novo en un México posrevolucionario.
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¿Por qué Salvador Novo?
Fue la coartada perfecta para trabajar en mi proyecto de hacer poesía fuera del poema. Me interesa mucho el relato sobre el poema, generar ese espacio intermedio entre mundo y poesía. La obra poética de Novo ha sido abandonada, en parte, porque destacó en otras cosas como el periodismo, la crónica, la prosa. Sin embargo, sus versos fueron vistos como poesía menor, sobre todo la obra satírica. Pensaban que nada más eran chistecitos pero para mí son su obra más radical y extrema.
¿De la orientación sexual de Novo provienen sus prácticas estéticas?
Monsiváis dice que sí; lo expresa en Lo marginal en el centro, y yo le creo. Novo desprendió de su orientación sexual prácticas vitales y estéticas. Tradicionalmente, en las orientaciones sexuales distintas, hay manifestaciones de resistencia. Novo adoptaba el papel de “La loca” como un ejercicio más para reivindicarse a sí mismo. Hay momentos donde consideraba a la poesía como lo más sublime pero creyó que su propia escritura era una frivolidad en torno a lo que podría ser la poesía.
Novo vivió una época en que las vanguardias estaban dominadas por el arquetipo del macho. ¿Sigue pasando esto?
Estamos en un tiempo extraño en el que la homosexualidad se ve como algo tóxico. Pero es un fenómeno muy relativo, depende de dónde seas gay. No es lo mismo ser homosexual en un espacio de privilegio académico, donde no hay ningún problema, que en otros lugares donde siguen matando gente por su orientación sexual. La teoría en los espacios académicos ha empezado a transformar la sexualidad, no sé si en algo demasiado intelectual y menos placentero. El cuerpo se ha convertido más en un discurso que en un goce verdadero.
¿Este libro funciona para reivindicar la figura de Salvador Novo?
A Novo lo han encajonado en el mismo paquete de los Contemporáneos, pero es muy distinto. Lamentablemente, la obra satírica de Novo solo se consigue en librerías de viejo, si tienes suerte y si no te quieren sacar un ojo de la cara. Me asombra que no se haya reeditado desde principios de los años ochenta. Ojala algún editor se ponga atento. En la sátira, Novo muestra su esencia más radical.