La soprano María Katzarava cierra el año en que conmemora dos décadas de una carrera que la tiene satisfecha y feliz –aunque haya padecido la “soledad del artista”– con dos conciertos en los que abordará, en uno, su pasión paralela a la ópera: la música popular; y en el otro, arias con las que forjó su fama.
“Estoy muy satisfecha por todo lo que he hecho en 20 años y por todo lo que falta. Si hoy tuviera que decir adiós, me sentiría feliz porque he logrado tantas cosas que ni siquiera me imaginaba. Gracias a Dios, la vida sigue y la carrera sigue tan activa como siempre, estoy plena”, evalúa así su trayectoria desde que fue la revelación en la Competencia Nacional de Canto Carlo Morelli en 2002.
En entrevista con MILENIO, no duda sobre que ha sido más difícil en dos décadas de carrera, que la han llevado a escenarios de Europa y Asia.
“Básicamente, la soledad que un artista vive, la dificultad de poder hacer una familia, la dificultad de tener hijos o un hijo, eso es lo que realmente se comió mi carrera. No, no me arrepiento absolutamente de nada. Además, nunca es tarde y en este momento de mi vida es cuando ya te puedes replantear todo aquello que no pudiste hacer al arranque de una carrera, que es lo más difícil”, refirió.
Hay así soprano para rato. Solo en esta semana se presentará en dos escenarios, con dos públicos y programas muy diferentes, para culminar una época de dolor familiar para ella, pero que, por otro lado, le permitió una intensa agenda en México desde justo hace un año en que participó en un recital en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, en homenaje a los colectivos de madres que buscan a sus hijos desaparecidos, acompañada por su colega Ana Caridad Acosta y, al piano, María Hanneman.
Katzarava tendrá un primer recital el jueves 1 de diciembre, a las 20:00 horas, con el que debutará en el Centro Cultural Roberto Cantoral, dentro del Décimo Festival Artístico de Otoño, acompañada al piano por Alain del Real; y, enseguida, el sábado 3, a las 20:00 horas, y el domingo 4, a las 12:00 horas, la cantante regresa a la sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario, para una gala de ópera con la Orquesta Filarmónica de la UNAM (Ofunam), con Enrique Patrón de Rueda como director huésped y alternándose y compartiendo el programa con el tenor guatemalteco Mario Chang.
Después de volver en mayo pasado al Palacio de Bellas Artes a protagonizar Juana sin cielo, la ópera que le dedicó el español Alberto García Demestres tras escucharla en el rol de la Liu de Turandot, y con la que según la soprano el compositor “sacó lo mejor de su voz”, Katzarava se presentó también en la edición 50 del Festival Internacional Cervantino el 12 de octubre pasado con un recital en la Alhóndiga de Granaditas acompañada por la Orquesta Filarmónica de Ciudad de México, dirigida por Scott Yoo.
Y apenas el pasado 20 de noviembre con esta agrupación capitalina, se había presentado en la sala Silvestre Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli con el Réquiem de Giuseppe Verdi, que sin duda asumió de manera más íntima tras la muerte de su madre Velia, en abril, y de su padre Archil, en mayo.
A principios de noviembre Katzarava interpretó el personaje de Catrina en el estreno mundial en San Diego de El último sueño de Frida y Diego, la ópera en español sobre los pintores comisionada por la Ópera de San Diego a Gabriela Lena Frank, con libreto del Pulitzer Nilo Cruz, compartiendo el montaje de Lorena Maza con los también mexicanos Guadalupe Paz y Alfredo Daza.
“Fue una casualidad que se juntaran tantos eventos este mismo mes, no me lo esperaba; me gusta muchísimo venir a México a cantar, siempre es muy importante tener una presencia fuerte en mi país y qué mejor que con los mejores eventos: el Cervantino, el Festival Artístico de Otoño y la gala con la Ofunam en la Nezahualcóyotl. Sí, es algo que me llena de dicha cerrar el año con México”, refiere la ganadora del primer lugar en Operalia 2008, en Quebec, donde también triunfó en zarzuela.
A diferencia de otras figuras internacionales de la ópera mexicanos que evaden hablar de la situación del país, Katzarava refrendó su postura ante la violencia y su respaldo a las “madres buscadoras”.
“Es muy necesario alzar la voz, es muy necesario desde nuestra trinchera ayudar dentro de nuestras posibilidades a todas las personas que lo necesitan, esa siempre ha sido la parte en la que yo intento estar activa, físicamente, en México, que tiene tantos problemas, tantos feminicidios. Dentro de mi trinchera estoy tratando de ayudar”, expuso al año de su participación en concierto en el Esperanza Iris.
Los recitales
En su debut en el Roberto Cantoral, Katzarava (Ciudad de México, 1984) interpretará en la primera parte del programa, con el acompañamiento de Del Moral, las arias “Senza mamma” (Suor Angelica) y “Vissi d’arte” (Tosca), de Giacomo Puccini; “Ebben! Ne andrò lontana” (La Wally), de Alfredo Catalani; “Pace, pace mio dio!” (La forza del destino), de Verdi; “Escúchame” (Florencia en el Amazonas), de Daniel Catán; y de la zarzuela Las hijas de Zebedeo de Ruperto Chapi, “Las carceleras”.
“Será un concierto muy redondo para acercar a todo tipo de público, con algunas arias que me han acompañado a lo largo de 20 años, y muchas piezas preciosas de la canción popular mexicana, mucho María Grever, Consuelo Velázquez, zarzuela, algo de José José”, expuso la soprano internacional.
En cambio, ambos conciertos de las galas del fin de semana con la Ofunam estarán dedicados a Puccini y a Verdi, principalmente, con selecciones de Tosca y La bohème, de las cuales Katzarava interpretará también “Pace, pace mio dio!” y “Vissi d’arte”, y “Si, mi chiamano Mimí”, además de “Ritorna vincitor!” (Aida). A dúo con Chang, cantará “Mario, Mario, Mario!” y “O soave fanciulla”. El tenor completará el programa con “E lucevan le stelle”, “Che gelida manina” y “Torna ai felici di” (Le villi).
Aunque adelanta que incluirá alguna canción mexicana de María Grever también, quizás en encores.
Sobre los públicos que acudirán a escucharla en estos escenarios, dijo sentirse cómoda con ambos.
“Estoy muy contenta y emocionada por los conciertos en el Roberto Cantoral y en la Nezahualcóyotl. Para mí el público es el mismo, siempre van a pasar un buen momento, yo nunca me quedo con nada en el bolsillo, siempre les entregó todo, es un disfrute para ambas partes, me siento cómoda con los dos públicos, no hago ninguna diferencia”, dijo la ganadora del Carlo Morelli en 2005.
Respecto a si piensa dar un giro a su carrera, como han hecho otros cantantes de ópera, para interpretar y grabar discos de música popular, como Fernando de la Mora o el mismo Javier Camarena, adelanta que para el próximo año y 2024, cuando celebrará su cumpleaños 40, estará grabando en ese género.
“A mí siempre me ha gustado la música popular, me gusta mucho el pop, es algo que siempre he tratado de hacer a la par de mi carrera operística, no al mismo nivel ni porcentaje de entrega porque no es posible hacer ambas cosas al mismo tiempo, pero sí me he visto involucrarme más. También me gusta mucho el jazz y he hecho algunos eventos, por ejemplo en el Festival de Jazz de Polanco (en junio 2021) o en algunos otros proyectos con Chacho Gaytán. Siempre me mantengo con un pie fuera de la ópera porque me gusta mucho lo popular, y la música pues es universal, hay que disfrutarla toda”.
La soprano mexicana, que cantó el rol de la Liu en la sala Nezahualcóyotl justo en noviembre de 2014, en la versión en concierto de Turandot también bajo la batuta de Patrón de Rueda al frente de la Ofunam, esboza así sus planes y retos para el próximo año, en que ya se prepara para nuevos papeles.
“Justamente estoy en pláticas para que se haga en 2023 Juana sin cielo, hay buenas miras para grabarla y seguirla presentando. También vamos a tener un par de óperas, cuando pueda hablar de ellas, lo haré.
“Ya tengo nuevos roles que abordar, nuevos cambios vocales que voy a cantar. Voy a cambiar de repertorio porque la voz va creciendo y entonces también hay que crecer el repertorio. Mi interés es debutar en Turandot, pero como Turandot no ya como Liu; también voy a cantar una ópera de Puccini, que es Edgar, y seguiré con Tosca, que tengo más adelante en España. Estoy justo en ese cambio”.
jk