Con el objetivo de presentar los pasajes emblemáticos de la historia que se desarrolló en La Laguna dentro del periodo, el Museo de la Revolución continúa sus actividades educativas para niños, adolescente y adultos en tanto que se reorientan los planes y proyectos para el año 2025, en coordinación con las autoridades estatales.
Así lo expresó Irma Hortensia Esponiza Trujillo, quien asumió la dirección del Museo de la Revolución en el año 2021, tras la jubilación de Silvia Castro a finales de diciembre de 2020. En entrevista, Espinoza Trujillo detalló que se trabaja en los talleres, recorridos y exposiciones temporales, al tiempo en que se destina trabajo al mantenimiento de la casa y el extenso jardín que posee.
- Te recomendamos “El IMCE me permite la cercanía con comunidades sin acceso a la cultura”, Antonio Méndez Vigatá Cultura
“El día de hoy tenemos la plática de lugares emblemáticos de la revolución en La Laguna por el historiador Carlos Castañón, será a las siete de la noche. Este museo prácticamente cumplió 17 años el mes pasado, ya estamos haciendo la proyección para el próximo 2025, ahorita ya estamos cerrándola”.
Dentro de los proyectos para el año entrante, la directora dijo que se proyectan dos talleres en tanto que se tienen activos otros dos dirigidos a niños y adolescentes: Iniciación a la pintura con la maestra Karla Mata que sesiona todos los jueves y El librero del Museo que se desarrolla durante los sábados que se realiza en colaboración con Grupo GEL, Gestión Emocional.
“Los vamos a seguir teniendo el próximo año, si los maestros lo permiten, me parece que el taller de El librero del Museo, que es el de GEL, ese ya nos dijo que el año que entra está con nosotros; de Iniciación a la pintura estamos en pláticas. También queremos meter uno que sería en verano, un tallercito de ajedrez para niños y jóvenes”.
¿Cuáles son los horarios?
Irma Espinoza dijo que se mantienen además las visitas guiadas con horario de martes a domingo de 10:00 a 17:30 horas para el público en general, en tanto que para grupos con más de diez personas la atención se ofrece hasta la 17:00 horas. La entrada es libre, con aportación voluntaria.
“El museo cierra a las seis pero les decimos que a las cinco y media porque llegan al diez para las seis y ya está a punto de cerrar, entonces quisiéramos que se dieran la vueltecita un poquito más tranquilo y por eso les decimos que hasta la cinco y media, así nos lleguen a las cinco 29, tienen perfectamente bien el tiempo para ver el museo que tiene cuatro salas, está dividido en Antecedentes, Revolución Constitucionalista, Las tomas de Torreón y Escisión revolucionaria”.
En la parte superior del edificio se ubica la sala de exposiciones temporales que exhibe “Ofrenda en el umbral” de los artistas Rogelio Guerrero y Rafael Torres.
En cuanto a lo que se aprecia en las salas permanentes las piezas emblemáticas son un máuser .7 milímetros realizado en Alemania ex profeso para el Ejército mexicano; las polainas o mitazas que usaban los revolucionarios, así como una máscara mortuoria y un acta de nacimiento de Francisco I. Madero, sin descartar un pañuelo que la última esposa de Francisco Villa donó al museo y otras piezas que se mantienen en comodato.
¿Dónde está el Museo de la Revolución?
La funcionaria refirió que los pocos ingresos que se registran por visitantes, se destinan al mantenimiento del inmueble. Ahora se considera necesaria la rehabilitación del techo toda vez que esta casona tiene más de cien años, al igual que los jardines. Este museo se ubica en la avenida Lerdo de Tejada No. 1029 en la zona centro de Torreón y se puede llamar al teléfono 871 7226 922.
“Nos mantenemos por medio de los donativos de las entradas al museo. De personal son tres guías, el velador, el intendente, el jardinero y una servidora, somos pocos y la casa requiere de mucha atención. Está bien ubicada y a su alrededor tiene estacionamiento… la parte de atrás sí amerita de mucha atención porque si estamos trabajando al frente, la parte de atrás la perdemos y sí es grande la propiedad y amerita mucho trabajo”.
dahh.