El Museo Experimental El Eco presentó sus próximas tres exposiciones, en las que se analizan el tiempo y el espacio, dos elementos esenciales cuando se habla de arquitectura pero también de un respaldo histórico, a través de maquetas, documentos o imágenes.
La primera muestra es un análisis que el Museo Experimental El Eco buscó al realizar la convocatoria de la décima edición del Pabellón Eco, proyecto que busca difundir el trabajo de gente joven y que está comenzando su práctica profesional en el ámbito arquitectónico.
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“El Pabellón hace este ejercicio de pensamiento y de intervención espacial en un lugar tan importante como el Museo Experimental El Eco. El poder acercar a nuevas generaciones a este tipo de espacios me parece fantástico; es una increíble plataforma para difundir el trabajo de gente joven que está comenzando su práctica profesional y la arquitectura es una disciplina compleja que cuestiona los problemas que hemos generado como humanidad, los lugares que habitamos, las cuestiones sociales y eso hace el Pabellón”, dice en entrevista Gabriela Carrillo, arquitecta y curadora.
En esta ocasión se recibieron 172 registros, del que resultó ganador la propuesta CUENCO, equipo conformado por OCIO taller, Bianchi Majer, Nicolás Guzmán, Angélica M. Pena y Andrés Lira, y que fue seleccionado por un jurado encabezado por Gabriela Carrillo.
De esta forma, surgiría el nombre de la primera muestra: Pabellón Eco 2023: CUENCO, proyecto que viste el patio del espacio cultural en un sentido temporal a través de la construcción de una sombra flotante, un dispositivo expuesto al flujo meteorológico de Ciudad de México y a la atmósfera misma que se vive en el patio del museo.
“La propuesta reaccionó a temas como la luz, la sombra, el envejecimiento de los materiales, la formación de seres creciendo en ciertas superficies. Al jurado nos pareció que este trabajo encontraba lugares para poder hablar del tiempo de una manera poco evidente, que podía reaccionar con el espacio. El Cuenco es una desmaterialización del objeto arquitectónico y pone el ojo más puntual en los factores y en los entes inmateriales, como el acumulamiento de la humedad o la construcción de un espacio que con la presencia del agua atmosféricamente se transforma”.
Construcción e imágenes
Además de exhibir la propuesta ganadora, el museo presenta hasta el 30 de julio otras dos exposiciones: Pabellón Eco 2023: Tiempo Cero y Archivo Vivo.
En Pabellón Eco 2023: Tiempo Cero se exhibirán las otras propuestas, esto a través de maquetas formadas por equipos interdisciplinarios y que se exponen en la Sala Mont del museo.
“Las siete propuestas finalistas estarán en el museo y es muy bello ver, desde las maquetas, que cada uno tiene su propia interpretación del Eco a partir del uso de materiales”. Y sobre el tiempo, a la arquitecta le parece esencial reflexionar sobre este “recurso invaluable y probablemente de los más preciosos que tenemos como especie”.
Finalmente, Archivo Vivo reúne documentos visuales y textos que dan cuenta de los ejes conceptuales en que fue erigido, en 1953, el Museo Experimental El Eco, espacio creado por Mathias Goeritz.
“Un edificio que en su momento puso sobre la mesa muchas preguntas, y eso me parece increíble porque El Eco más que ser un edificio, es un espacio de reflexión y cuestionamiento, además es una provocación espacial fantástica”, concluye Gabriela Carrillo.
PCL