La permanencia en casa dictada como medida sanitaria en una primera etapa para evitar la propagación de la pandemia por el covid-19, alejó a los públicos de los recintos culturales en términos generales y en particular de los museos, en los cuales, las directoras no dudaron en cerrar las puertas para evitar los contagios.
En medio de la crisis, el arte, la cultura y la ciencia, salieron de los recintos de todo el mundo, de tal suerte que los contenidos museográficos se volcaron en las redes sociales para llegar a los domicilios de los interesados, lo que permitió no sólo mantener la atención de los visitantes, también traspasar las regiones.
En la zona metropolitana de La Laguna ese fue el caso de los museos Arocena y el de los Metales así como el de los dependientes del gobierno de Torreón, en tanto que otros permanecieron en la pasividad que arrastran desde años atrás sus administradores.
Museo Arocena
El primer caso de covid-19 detectado en México se registró el 27 de febrero del año 2020 y un mes más tarde las instancias culturales anunciaron sus planes ante la contingencia, situación que debió sortear Rosario Ramos Salas en el Museo Arocena.
Luego de aplicar protocolos sanitarios y antes de concluir la primera quincena de diciembre de 2000, Ramos Salas anunció su renuncia y estableció que la dirección quedaría en manos de Fabiola Favila Gallegos, quien tras algunos meses fue ratificada en el puesto.
El 14 de abril de 2021 Favila Gallegos en entrevista para MILENIO, externó que la pandemia, como a todos, los tomó por sorpresa, pero aún con el museo cerrado el equipo trabajó desde casa y abrió la posibilidad de llegar a más públicos desde la virtualidad.
“Hemos crecido en redes sociales de una manera impresionante. Hemos llegado a gente que ni nos imaginábamos, por ejemplo niños que tomaron el curso de verano el año pasado de todo el país y en el extranjero. Los talleres de invierno que también fueron digitales llegaron a países europeos y de América Latina”.
Sala nueva y transporte para el Museo de los Metales
Otro ejemplo virtuoso fue el del Museo de los Metales que el próximo 19 de mayo abrirá una sala interactiva denominada ‘Usos y aplicaciones de los minerales y metales en la vida’.
Su directora, Cristina Matouk, explicó que a través de la tecnología entre la que se citan la realidad virtual y la realidad aumentada, los visitantes podrán conocer los usos que tienen los metales en la vida cotidiana con su nueva propuesta museográfica.
“El 19 de mayo a las once de la mañana se hará la apertura para los primeros grupos escolares a esta nueva sala”.
Al Museo de los Metales y al Arocena, las redes sociales les permitieron mantener a sus usuarios y captar nuevos públicos, en tanto que no se abortaron sus proyectos.
Desde el mes de marzo pasado comenzaron a recibir grupos de los clubes de ciencia y se invita al público en general y a las direcciones de las escuelas a regresar.
La diferencia de acuerdo a Matouk la dicta justo la producción de contenidos en redes sociales pero también en plataformas como Zoom o Meet para capacitar a maestros en los temas de geología, química y física, entre otros.
Otra noticia que compartió Cristina Matouk fue que en breve se podrá utilizar un camión para poder movilizar niños y jóvenes de escuelas públicas que quisieran conocer el recinto.
Cabe señalar, que la pandemia también impactó los espacios culturales públicos y en el caso de los museos, estos debieron cerrar sus puertas para evitar los contagios. La contingencia la debió sortear la administración anterior encabezada por Jorge Zermeño, que antes de concluir, retomó las actividades presenciales.
aarp