El 28 de diciembre pasado se cumplieron 406 años de que Neptuno fuera observado por primera vez. El logro correspondió a Galileo Galilei, aunque erróneamente catalogó al planeta como una estrella.
Los dibujos de Galileo muestran que observó Neptuno el 28 de diciembre de 1612, y de nuevo el 27 de enero de 1613. En ambas ocasiones, Galilei confundió Neptuno con un estrella fija cuando apareció entre las lunas de Júpiter en el cielo nocturno.
Como apenas empezaba su ciclo retrógrado anual, se creía que el movimiento de Neptuno era demasiado lento y su tamaño aparente demasiado pequeño para aparecer como un planeta en los pequeños telescopios de Galileo. Sin embargo, en julio de 2009 David Jamieson, físico de Universidad de Melbourne, anunció haber hallado una nueva evidencia que sugiere que Galileo era consciente de que había descubierto algo inusual en esa estrella.
En uno de sus cuadernos, observó el movimiento de una estrella de fondo (Neptuno) el 28 de enero, y un punto (en la posición de Neptuno), elaborado en una tinta diferente, sugiere que lo encontró en un boceto anterior, el cual habría sido elaborado en la noche del 6 de enero, lo que sugiere una búsqueda sistemática. Sin embargo, no hay pruebas de que identificara a ese objeto como un planeta.
Cronología
28/12/1612
Galileo Galilei observa el planeta por primera vez.
31/7/1846
El matemático francés Urbain Le Verrier calcula la posición exacta del planeta.
23/9/1846
En el Observatorio de Berlín, Johann Gottfried Galle localiza a Neptuno justo en la ubicación señalada por Le Verrier.