Rescatar y revalorar la presencia de compositores nacionales en las salas de conciertos, es uno de los objetivos de la Orquesta de Cámara de Bellas Artes (OCBA) dentro de la Segunda temporada de 2022, que se realizará del jueves 6 de octubre al domingo 11 de diciembre y que tiene contempladas nueve presentaciones.
“Los programas abarcan un repertorio muy amplio, además, tenemos el gusto que en esta temporada la orquesta estará al 100 por ciento de integrantes, lo que nos permite abarcar un repertorio de mayor peso de lo que pudimos tocar en la pandemia por los protocolos. Ahora ya podemos estar los 23 integrantes de la orquesta y eso nos permite hacer un repertorio más amplio”, explica en entrevista Ludwig Carrasco, director artístico de la OCBA.
- Te recomendamos Murió David Huerta, reconocido poeta mexicano, a los 72 años Cultura
El primer concierto permitirá explorar la influencia de la música folclórica o la música popular en la música de concierto, además de que se contará con la participación de la solista Elena Durán en la flauta y del violinista Fernando Mino. El 6 de octubre a las 20:00 horas en el Palacio de Bellas Artes y el 9 de octubre a las 12:00 horas en el Conservatorio Nacional de Música, se interpretarán obras de Arturo Márquez, Efraín Oscher y Béla Bartók.
Difusión de autores mexicanos
Esta temporada apuesta por un repertorio de autores poco interpretados en nuestro país, como Moór, Hamerik, Mariano Elízaga, Salvador Contreras o Konstantia Gourzi. Con estas actividades la OCBA continúa su labor de difundir la música mexicana en Ciudad de México, así como en el interior de la República mexicana.
Para la elaboración del repertorio de esta temporada, Ludwig Carrasco asegura que se contempló “las necesidades de la orquesta para seguir creciendo y para seguir buscando la excelencia artística; hay que ver lo que podemos ofrecer al público y dentro del repertorio se hace una selección de obras. Hay varios hilos conductores, uno es explorar la influencia de la música tradicional, la música popular en la música de concierto, pero también la diversificación del repertorio y ofrecer diversos periodos musicales”.
Sin embargo, su director destaca dos conciertos: un homenaje a dos compositores importantes en la música en México, pero que están un poco olvidados: Mariano Elízaga, que fue maestro de capilla, y también a Salvador Contreras, uno de los integrantes del grupo de los cuatro que se dedicó en la etapa del nacionalismo a difundir su música. Conciertos que se llevarán a cabo el jueves 10 de noviembre en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes, y el domingo 13, en el Conservatorio Nacional de Música.
En estos nueve programas participarán cinco directores huéspedes y 15 solistas invitados, entre los que destacan Bruno Borralhino, un director portugués radicado en Alemania, y Armando Merino, un director español que tiene experiencia en música contemporánea y en repertorio tradicional.
Además, en esta temporada habrá una colaboración especial con la Coordinación Nacional de Música y Ópera del Inbal, a través de los Concertistas de Bellas Artes y con el Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información Musical Carlos Chávez (Cenidim).
La importancia de rescatar a autores poco escuchados, concluye Ludwig Carrasco, es “brindar nuevas opciones al público, opciones que tal vez no pueda encontrar en otras programaciones musicales de otras orquestas, o incluso en internet mismo, ya que no hay grabaciones o no se han podido realizar transmisiones que el público pueda apreciar; por otro lado, mientras el público más explore y abra sus horizontes musicales o culturales en general, seguirá creciendo como público y persona”.
“Es una programación muy variada donde seguro hay obras y conciertos para todos los gustos. Tenemos un distinguido elenco de solistas y directores mexicanos, y qué mejor que poder disfrutarlos en la Sala Ponce del Palacio de Bellas Artes o en el Conservatorio Nacional de Música, donde, en este último, los conciertos son gratuitos”, finaliza Ludwig Carrasco.
PCL