Después de unos años en el abandono, llegó el día en que comenzaron los trabajos de demolición de El Plaza. Entre sellos de clausura, pintas y pequeñas bardas de metal se encuentra el edificio que por años retumbó con música y gritos eufóricos de distintas generaciones.
A poco más de 3 años de su clausura, la fachada del recinto de la colonia Condesa Hipódromo deja ver los estragos del sismo del 19 de septiembre de 2017, sumado a la poca atención que recibió tras la contingencia por la pandemia de covid.19.
Vince, vocalista de Rebels Cats, contó a MILENIO que las experiencias en El Plaza eran mágicas, ya que le dio la oportunidad de disfrutar a muchos de sus artistas favoritos, de ver y apoyar a sus amigos sobre el escenario y brindarle un foro lleno.
“Nos duele muchísimo que haya cerrado uno de los foros más bonitos, con una capacidad, creo, perfecta. Era uno de los lugares más bonitos, incluso, con el mejor sonido del país, me atrevo a decir”.
En el sitio se encuentra personal de DYMSA, empresa especializada en demoliciones de industrias químicas y manufactura. A las afueras del edificio esta una lona que indica que la demolición cuenta con la autorización de la Comisión de Reconstrucción del Gobierno de Ciudad de México, en coordinación de la SEDEMA, la Secretaría de Protección Civil, SEDUVI y la alcaldía Cuauhtémoc.
“Los temblores aquí en México se han llevado tantas cosas y a tanta gente. Qué lástima que ahora se lleva a uno de los mejores recintos del país”.
Vince rememora con alegría que compartió el escenario con Tiger Army, una de sus bandas más queridas, incluso, recordó que El Plaza les dio un sold-out, donde compartió el escenario con Mon Laferte, Dr. Shenka, Panteón Rococó, Charly Montana, entre muchos más.
“Yo siento que El Plaza era este paso entre el Lunario y el Metropólitan, algo así más o menos es como yo lo calculo. Entonces sí, para la escena afecta que de repente falta ese recinto, le falta ese foro a la ciudad”. Oliver Ortega, vocalista de la banda independiente I Can Fly, comentó que es una pena que un lugar emblemático para la escena musical mexicana será demolido, ya que para su agrupación representó la transición de ser parte del público a integrar el line up de uno de los recintos más reconocidos.
“Creo que sí era un referente. Incluso, como banda independiente era todo un reto llegar a tocar en ese lugar.”
La taquilla exhibe en el mostrador los últimos anuncios al público, entre ellos, el aviso de cancelación de la cartelera del mes de marzo de 2021, fecha en la que el recinto cerró al público.
“Lo que vivimos como banda fue que era como conocer los lugares ya profesionales de México, o uno de los lugares emblemáticos y tocar ahí fue toda una experiencia, aprendimos mucho ese día que nos presentamos ahí”, señaló Oliver Ortega.
El adiós al Plaza
En opinión de David Barajas, fotógrafo de conciertos nacionales y un habitual en El Plaza desde 2014, dijo que fue uno de los mejores espacios donde las bandas podían presentarse.
“Siento que nada dura para siempre y fue un ciclo que se terminó A muchos nos duele haber perdido ese “venue”, porque nos daba buena visibilidad al ver los shows. Pocas veces había mala iluminación o mal sonido. Era un recinto pequeño donde te sentías muy cercano a lo que estaba sucediendo frente a ti”.
En el recorrido realizado por MILENIO se preguntó a trabajadores de DYMSA sobre la futura situación de El Plaza; sin embargo, señalaron que desconocían esa información. No obstante, se pudo constatar que el techo y las paredes de la entrada principal presentan huecos por el desprendimiento de cemento, mientras que algunas ventanas de los pisos superiores están rotas.
“Pensemos que fue la misma naturaleza que nos lo quitó. O sea, los terremotos. Realmente, me gustaría pensar, que si fue por nuestra seguridad. Si me hubiera gustado que se hubiera podido rescatar, pero entiendo, cada quien tiene sus razones y también me parece que quedó en un buen recuerdo”.
DAG