La crisis del Nobel de Literatura se remonta a noviembre de 2017. Hace casi un años, 18 mujeres denunciaron en un diario los abusos sexuales cometidos por una persona vinculada a la Academia Sueca, después identificada como Jean-Claude Arnault, un artista francés casado con la poeta académica Katarina Frostenson y al frente de un prestigioso club literario.
El caso desató un conflicto interno que en los últimos meses ha provocado la salida de ocho miembros, aunque solo cuatro han hecho efectiva su renuncia.
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La Academia cortó la relación y encargó una auditoría, que concluyó que Arnault no había influido en decisiones sobre premios y ayudas, aunque el apoyo económico recibido por su club literario incumple las reglas de imparcialidad al ser su esposa copropietaria. Hace pocos días, Arnault fue condenado a dos años de cárcel por un caso de violación cometido en 2011 contra una mujer.
Presionada por la Fundación Nobel, la Academia Sueca ha impulsado varias reformas en los últimos meses y eligió la semana pasada a dos nuevos miembros.
Mientras tanto, un grupo de intelectuales suecos —impulsados por la escritora y periodista Alexandra Pascalidou y financiados gracias a una campaña en Kickstarter— creó la Nueva Academia, una institución con la misión de garantizar que este año se conceda un premio internacional de literatura.
La logística agrupó a más de un centenar de miembros, incluidos otros autores, bibliotecarios y artistas de ese país nórdico.
Entre los finalistas figuraban el escritor británico Neil Gaiman, la canadiense de origen vietnamita Kim Thuy y el japonés Haruki Murakami, quien declinó la nominación argumentando que quería mantenerse alejado de la atención mediática para centrarse en la escritura.
La ganadora, anunciada este viernes, fue la escritora guadalupeña Maryse Condé, autora de una veintena de novelas y se ha ocupado en sus obras del colonialismo y sus consecuencias.
Pascalidou dijo durante el acto en el que se anunció el nombre de la galardonada que se sintió "avergonzada" cuando la Academia Sueca anunció que no habría Nobel de Literatura este año.
Dijo que para seleccionar a los candidatos se hizo una consulta a lectores, "a gente que ama la literatura, que está más necesitada que nunca en un mundo tan polarizado".
El premio, dotado con un millón de coronas suecas (unos 100 mil euros), será entregado el 10 de diciembre, el mismo día en que se entregan los auténticos Nobel, y al día siguiente está previsto que se disuelva la organización.
*Con infromación de agencias
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