El Templo principal de la comunidad Poxindeje, con más de 240 años de antigüedad, reunirá una vez más a sus pobladores, en el municipio de San Salvador, que se preparan para realizar su fiesta tradicional en honor a la Virgen de la Candelaria.
La también llamada Feria de la Semilla abraza diferentes actividades, tanto religiosas como deportivas y artesanales, con el fin de seguir dando un espíritu de júbilo a esta fecha especial para los pobladores.
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“Contaremos con diferentes actividades como torneos de lucha libre, show de payasos, carrera atlética en sus diferentes categorías, feria de artesanías del valle del Mezquital, feria del libro, taller de cerámica, carreras de motocross con pilotos de toda la República Mexicana, actividades litúrgicas y función de gala del Ballet Folclórico de Álvaro Serrano”, señaló Cándida Camargo Hernández, directora de Turismo Municipal.
La comunidad Poxindeje, inmersa en el Valle del Mezquital, es un recuerdo de la unión de la religión católica y el rito prehispánico de la fertilidad, a través de la fiesta de La Candelaria, con sede en el templo construido en 1773.
“De acuerdo con la tradición, los habitantes aprovechan el evento religioso para pedir por el éxito de la cosecha y nuestros antepasados, al iniciar el ciclo agrícola, colocaban en una canasta semillas y las llevaban ante la virgen de La Candelaria, quien sostiene al niño Dios y ostenta en su vestimenta representaciones de la vegetación local, símbolo de fertilidad y desde entonces el 2 de febrero, en ‘el lugar donde emana agua’, las personas celebran a la patrona del pueblo”, indicó el historiador Agusto Pérez, durante la conferencia de prensa que se llevó a cabo la mañana de este viernes en las instalaciones de la secretaría de Turismo del estado.
Desde 1993, la feria se ha hecho más conocida, por lo que los organizadores de este evento agregaron la cultura en su festividad religiosa con eventos de pintura, exposiciones y talleres lúdicos.
Cabe señalar que el 16.19 por ciento de la población de Poxindeje es indígena, de ésta, 6.49 por ciento habla una lengua indígena.