La muerte de ex presidente coahuilense Venustiano Carranza Garza, es considerada como un caso de asesinato con muchas vertientes por resolver, un caso que se asemeja a tratar de recomponer todas las partes de un espejo roto, tal como se expresa en el texto del libro “La muerte de Venustiano Carranza”, de Lucrecia Solano, presentado en el Museo Regional de La Laguna de Torreón, Coahuila.
“En la página 111 está el objetivo del libro y dice: ‘Hice este libro preocupada por recomponer, con tantas astillas dispersas, el espejo roto de la memoria’. Obviamente es difícil recomponer un espejo, pero es más difícil recomponer la memoria”, expresó el historiador Javier Garciadiego, en su participación como presentador del texto.
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Al respecto, la autora del libro compartió que la idea del tema surgió después del asesinato de la muerte del candidato a la presidencia, Luis Donaldo Colosio, en 1994, lo que la haría a decidir adentrarse a lo que pasó el 21 de mayo de 1920 en el poblado de Tlaxalantongo, Puebla, donde fue abatido a balazos el nacido en Cuatro Ciénegas, Coahuila.
“Fue tal el impacto a los mexicanos ese asesinato, que pasaron dos días, y como para una catarsis, decidí trabajar la muerte de Carranza con una pregunta: ¿Qué pudo haber sucedido aquel 21 de mayo de 1920?”, dijo Solano.
Así, empezó la búsqueda de los documentos y testimonios posibles sobre aquel día. Se concentró en obtener testimonios de testigos presenciales del acontecimiento, testigos de la época, adversarios, correligionarios y opiniones en general, un trabajo historiográfico con referencias de hemerotecas y bibliotecas de México y Estados Unidos.
Lucrecia Solano, historiadora miembro del Colegio Coahuilense de Investigaciones Históricas, detalló que fueron diferentes aportaciones literarias las que le permitieron producir un relato inteligible sobre aquellos hechos, desde la estructura de “Crónica de una muerte anunciada”, de García Márquez, al texto de Paul Wyne “Cómo se escribe la historia”.
En su oportunidad, Javier Garciadiego se encargó de platicar el contenido y la proyección del libro, en que se desmienten algunas versiones de lo ocurrido aquella noche en la que se se llegó a decir que se había tratado de un tiroteo y hasta que se trató de un suicidio.
“La muerte de Carranza no pudo ser un suicidio, fue un asesinato, tampoco fue producto de un combate. Lucrecia hace una investigación en donde demuestra que hay varios calibres en los orificios de Carranza; hay varias trayectorias y sobre todo, las balas habían tenido un impacto previo, lo que indica que dispararon desde afuera”, dijo Garciadiego.
“Este libro es mucho más que una monografía de la muerte de Carranza. Es un libro de historia. Este libro es fascinante porque es un libro ‘shakespeariano’”, dijo.
EGO