En La promesa rota, su segundo libro, la mente aunada con el ojo de Guillermo Kahlo tiene como protagonistas diversos personajes del género de todos los tiempos.
Cada personaje del libro La promesa rota posee una profundidad intrínseca en relación con su obra, en donde la libertad es inexistente, expone Guillermo Kahlo, quien dice haberse dado cuenta de que Don Giovanni pudiera estar manipulado por las mujeres mediante cada anécdota.
La apertura del libro narra el camino por un túnel oscuro, el cual tiene como alegoría la transportación del tiempo por medio de la música, el teatro, la vista, la historia, el engaño, el drama, el amor y todo lo que construye y caracteriza a la ópera.
En la primera página se aprecia un retrato a base de claro-oscuro de una Mimí, personaje principal de La Boheme de Giacomo Puccini, y una imagen de una mano femenina tocando el pecho de un hombre de lado del corazón. Cada retrato es un momento crucial que aborda al subtexto de cada personaje de la ópera, que en la vida real llegan a representar a los grandes arquetipos humanos.
La ópera es una manifestación de arte de gran tamaño y costos elevados, cuyo repertorio no se actualiza fácilmente. La emoción salvaje, indescriptible y voraz es la que lleva al estallido de un personaje a la canción, y de esta misma forma, inspirado por los pinceles de Caravaggio y Goya, Kahlo dice plasmar en cada uno la catástrofe humana, el heredero de la túnica de los aspectos más oscuros de la tragedia griega.
Al igual que en el ballet, los retratos de este libro muestran una contradicción esencial entre lo que el ritual expresa y la realidad de ese suceso. “Siempre hay una anécdota, lo interesante aquí fue rebasarla. Lo que sucede con la ópera es que la historia puede estar ya de alguna manera caduca, sin embargo, el ser humano seguirá siendo el mismo durante todos los tiempos, del mismo modo en que el personaje trasciende su propia historia".
El eje literario del proyecto está constituido por las pasiones y la condición humana, desde las más bajas a las más altas, desde el ser humano en su luminosidad hasta su oscuridad más abrupta, como pudiera ser la muerte y la dualidad de Romeo y Julieta, el egocentrismo de Rigoletto, el amor de Salomé a Juan Bautista, las promesas cumplidas e incumplidas de Otelo y la tenacidad y amor de Carmen.
La tecnología que se utilizó en el estudio de este proyecto no fue de vanguardia, sino que se quiso llegar a estar tan próximos a las historias atribuidas a la Edad Media y el Renacimiento, que aproximadamente 40 por ciento de los retratos fueron bajo la luz de dos velas.
“La ópera es nuestro espejo más suntuoso y pienso que un personaje a través del tiempo es como un ser humano, jamás está resuelto, pero al igual que en la vida real, la lucha por encontrar el amor y el conocimiento es tenaz, en cada paso o cada melodía”, expone.
Fueron 90 días de producción para que el sentido de cada retrato captara la esencia de cada personaje, mientras una combinación sinérgicamente con la naturaleza equilibró momentos de pura visualidad subrayando las cualidades vanguardistas de este arte tradicional.
Esta obra literaria y fotográfica saldrá a la venta en breve pero ya se puede hallar en gkhalostudio@gmail.com.
cjr