Ha llegado la época del año más esperada por algunos fanáticos del Halloween o del Día de muertos en México, sin duda alguna, fechas que nos invitan a conocer más de algunos datos que poco sabíamos de ellos, relacionados a los hechos históricos que marcaron un antes y un después.
Hay muchas leyendas que comienzan a tener más difusión durante octubre y noviembre debido al alto impacto que tienen las historias, como el suceso que trascendió en Estados Unidos con un grupo de mujeres acusadas de brujería.
Las brujas de Salem
A veces algo tan mínimo puede desencadenar en el descubrimiento de algo más grande que puede provocar la desestabilización de una sociedad entera, logrando someter con miedo y algunas formas de manipulación de la información derivada de la falta de conocimiento sobre diversas áreas de la vida.
A finales del siglo XVII, un diagnóstico oscurantista de un médico ignorante lograría una caza de brujas que estremeció a Salem, un pequeño pueblo de pescadores de la colonia inglesa de Massachusetts, lugar que décadas después sería conocido como Estados Unidos.
En 1692, el doctor William Griggs, presionado por los personajes perseguidos en la época o por sus mismos intereses, tuvo que indagar en los extraños comportamientos que estaba teniendo la hija y la sobrina del reverendo Samuel Parris.
Un día después de tener acercamiento con las dos niñas, el médico dictaminó frente a las autoridades de la comunidad que no había hallado ningún problema físico que las aquejara, por lo que no tenía dudas de que se trataba de una influencia directa del demonio.
Fue en ese momento que los mandatarios de la localidad reaccionaron y a su paso dejaron como saldo 18 ahorcados, un muerto en manos de la tortura y más de 150 encarcelados; pero hay tres casos que llamaron la atención y es el de Tituba, Sarah Osborne y Sarah Good.
¿Quién es Tituba?
Todo comenzó cuando el reverendo llegó a la comunidad de Salem acompañado de sus tres hijos, Elizabeth, Tomás, Susannah y su sobrina Abigail Williams y con ellos llegó una esclava llamada Tituba.
El tema de la brujería comenzó cuando Elizabeth de 9 años, Abigail de 11 y una amiga de 12, fueron sorprendidas bailando desnudas en el bosque, mientras que Tituba removía un liquido dentro de un caldero puesto sobre el fuego.
Después de ese episodio, las niñas comenzaron a tener comportamientos extraños, entre estos están las convulsiones, palabras sin sentido y largos episodios de llanto, lo raro es que otras chicas de Salem comenzaron a presentar la misma sintomatología.
Fue la amiga, Ann Putnam, quien reveló que todo lo que estaba pasando con ellas era a causa de brujas. En ese momento, al ser descendientes de familias adineradas comenzaron una cacería para encontrar a los culpables.
Cuando las niñas fueron interrogadas, éstas señalaron a la esclava Tituba de haberlas iniciado en los ritos satánicos. De igual manera los rumores de otras brujas también llegó a los oídos de todo el pueblo, se trataba de Sarah Osborne, una anciana que nadie quería en Salem y Sarah Good, una indigente que estaba embarazada y nadie sabía de quién.
Tituba pertenecía a Samuel Parris y fue la primera mujer en confesar que practicaba la brujería, la revelación se dio cuando ella era golpeada por su amo. En su confesión habló de perros negros, cerdos, un pájaro amarillo, ratas rojas y negras y como volaba sobre un palo de un sitio a otro.
A pesar de ser esclava y haber confesado tales crímenes, Tituba no fue juzgada ni ejecutada, fue enviada a prisión y más adelante puesta en libertad, sin embargo, su paradero fue desconocido, aunque se sabe que alguien, mientras ella estaba en la cárcel, la compró, según varios historiadores como George Bancroft, William Charles y Longfellow.