"Un rincón del alma", filme con verdades sobre lo más oculto de Eliseo Alberto

Ambos hijos de poetas, Eliseo Alberto y Jorge Dalton se encontraron en diferentes etapas de su vida; el segundo, hijo del escritor salvadoreño Roque Dalton, tuvo la oportunidad de estar muy cerca de la familia del cubano. De esos años y conocimiento surgió un documental: Eliseo Alberto. Un rincón del alma.

“En 2009, Lichi me pidió que tuviéramos una conversación filmada, simplemente eso, porque en ese momento no había pensado en hacer un documental, partir del libro Informe contra mí mismo, hicimos esa grabación el uno de enero de 2010, duró como cinco horas; en 2011 muere. Pero fue hasta dos años después cuando me puse a pensar que esa conversación filmada podría convertirse en un documental”, cuenta a MILENIO el cineasta salvadoreño.

El filme está recorriendo festivales internacionales: fue seleccionado para el Festival de Cine de Guadalajara, ha estado en Toronto, en la cinemateca Nacional en Florida, en festivales de España y de Francia, y ahora se exhibió como parte del programa de la Feria Internacional del Libro de Coahuila, organizada por la Secretaría de Cultura de la entidad.

La película, cuenta Jorge Dalton, ofrece una visión personal de los más de 50 años de la Revolución cubana, “una gesta que no fue de color de rosa, y aquí se revelan verdades” que hasta ahora habían permanecido ocultas o son muy propias del escritor.

“Tanto Eliseo como yo somos hijos de ese proceso revolucionario y tenemos la necesidad de decir cosas hasta ahora complejas o que no se dicen fácilmente: suelen existir muchas miradas alrededor de Cuba y la gente se pregunta qué ha pasado en Cuba después de que Fidel murió, qué va a pasar después del proceso de acercamiento con Estados Unidos. Hay una gran cantidad de interrogantes... muchas de esas preguntas se intentan responder a través de la película, pero a partir de la emoción, de la pasión”.

Panorama revolucionario

Eliseo Alberto. Un rincón del alma no es un documental alrededor de Informe contra mí mismo, hay cosas que tienen que ver con el libro, pero básicamente es la última conversación en vida con Lichi, que lo mismo es una reflexión sobre el proceso revolucionario o un homenaje al escritor, y un poco más: es también una reflexión para “quienes hemos conocido el proceso, para quienes conocemos los procesos revolucionarios latinoamericanos, pero también un análisis de cómo en algunos momentos hemos perdido la razón. Por eso es importante haber construido el documental”.

La conversación revela ciertas intimidades, por ejemplo del grupo Orígenes, el grupo literario más importante de la Cuba republicana, si bien cuando triunfa la revolución se ve inmerso en una serie de dificultades, porque fueron catalogados de burgueses por el nuevo proceso, entonces su vida no era muy fácil. “Verdades que se revelan a partir de Eliseo Alberto”.

“Al ser hijo de ese proceso revolucionario no tengo interés de alimentar la pasión, ese fue el camino que escogí: es un momento hermoso el recordar las virtudes de ese proceso, pero también la película levanta ‘las faldas’ a ese bello y trascendental proceso.

“Soy revolucionario, no porque sea un militante, sino por el simple hecho de ser un cineasta y los revolucionarios tenemos el deber de hablar con la verdad. Decir siempre la verdad es revolucionario”.

La película está en el clásico recorrido por los festivales, la terminó en diciembre de 2016, y en el 2017 y 2018 ha participado en todas las muestras cinematográficas. Ha sido muy bien recibida, incluso entre gente que podría considerarse muy radical.