De acuerdo con Darío Flota, director del Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo, impulsor del Festival de Jazz de la Riviera Maya (FJRM), “el confinamiento al que hemos estado sometidos ha causado, en mayor o menor medida, una gran cantidad de estrés y tensión acumulada. Yo creo que la música, como actividad artística, sirve para tocar las partes más sensibles del ser humano, de ahí que va a tener un papel fundamental en el regreso a la vida normal”.
En conferencia de prensa celebrada en días pasados, el funcionario mencionó que “ofrecer la posibilidad de disfrutar un espectáculo de esta categoría, de este nivel musical, cumple con una función social; tampoco hay que olvidar que la razón fundamental de nuestro festival es que durante muchos años ha sido uno de los pilares de la estrategia de promoción turística, particularmente de la Riviera Maya”.
Sin embargo, agregó, “el FJRM es una tradición que la pandemia ha trastocado. Por ello, para la decimonovena edición tomamos unas decisiones complicadas conforme los meses iban avanzando y no teníamos la certeza de las condiciones en las que estaríamos en el tema de la pandemia para los días del festival. No podíamos asegurar un evento presencial y era difícil acordar con el elenco cuáles serían las condiciones de su presentación, y si lo haríamos de manera presencial o solo sería transmitido a través de nuestros canales digitales”.
Al llegar el momento de tomar una decisión, agregó, “decidimos hacerlo de manera digital del 25 al 27 de noviembre, con algunas actividades presenciales. Esta vez no lo vamos a realizar en Playa Mamitas, que ha sido nuestra sede desde la tercera edición, pero estamos seguros de que podremos volver el próximo año, cuando se celebre el 20 aniversario en todo lo alto, como estamos acostumbrados. Este año, los conciertos estelares se llevarán a cabo en el Teatro de la Ciudad de Playa del Carmen sin público y se transmitirán en vivo por las redes sociales”.
Programa
El festival iniciará el 25 de noviembre con un desfile circense y musical a lo largo de la Quinta Avenida, en el que participarán las compañías Zaikocirco y 20 Varos. También se ha invitado a bares y restaurantes a que se unan a la fiesta presentando bandas de jazz para que el desfile se vaya activando conforme recorra la avenida.
El 26 de noviembre se llevará a cabo el primer concierto con la participación de la joven trompetista y cantante canadiense Bria Skonberg, quien en tiempo de pandemia se volvió muy popular con más de 11 millones de reproducciones de su obra en Spotify.
La noche se complementará con un músico de apellido legendario, el saxofonista Ravi Coltrane –hijo de John Coltrane–, quien al principio de su carrera trató de despegarse del influjo de su padre, presentará un homenaje con la obra de este músico innovador.
Al día siguiente, la cantante y compositora Dannah Garay representará al talento nacional con la interpretación de su disco más reciente, My Miracle, que incluye 12 canciones de su autoría con arreglos de Alex Mercado.
El festival cerrará con la participación de Kurt Elling, a quien el New York Times ha destacado como “el mejor cantante masculino de nuestro tiempo”, que hará mancuerna con Charlie Hunter, maestro de la guitarra de siete y ocho cuerdas.
Después de los conciertos se realizarán sesiones de medianoche con el grupo Riviera Maya All Stars, que incluye a la cantante Elizabeth Meza, el saxofonista Alex Campos, el pianista Mark Anderud, el contrabajista Luri Molina y el baterista Giovani Figueroa. El quinteto encabezarás las jam sessions a las que se invitará a participar a otros músicos, incluidos los participantes en el festival.
Entre la agonía y el éxtasis
Guitarrista de probada solvencia que el año pasado se presentó como invitado con el grupo Elite Band, Darío Flota comentó que, como músico, organizar el festival “permite que el rango de los sentimientos se agrande. Esto significa que me emociono mucho, y también lo sufro muchísimo, me agobio, me estreso y me preocupo demasiado para que todo salga bien. Por fortuna tenemos un gran equipo de colaboradores para la organización, la comunicación, la difusión y la producción. En esos días, la neurosis que vamos acumulando la tenemos que enfocar para que todo salga bien”.
Gracias a la experiencia de 19 años, agregó, “lo disfruto tal vez como nadie cuando se desarrolla, me entristezco cuando se termina y me preocupo muchísimo cuando empieza la organización del siguiente. Yo creo que lo vivo con mucha intensidad”.
Actividades complementarias
Como preámbulo al festival, desde el 3 y hasta el 21 de noviembre se lleva a cabo un programa complementario con 58 actividades, a desarrollarse en Playa del Carmen. Hay conciertos en diversos foros, clases magistrales y conferencias, enfocadas al público joven y a cualquier seguidor de la música de jazz. De acuerdo con Darío Flota, “se ha hecho un gran trabajo para integrar a muchas bandas, a muchos conferencistas y talleristas, de manera que hasta el 21 de noviembre el jazz tendrá presencia en Playa del Carme
bgpa