Secretos de Pérez Prado que sólo verás en la Fonoteca

¡Yo soy! ¿Quién? El rey del mambo es la exposición con que la Fonoteca Nacional celebrará el centenario de Dámaso Pérez Prado, además de una serie de actividades para evocar su vida y obra.

“Pérez Prado fue un excelente pianista, un gran compositor, arreglista y, según los cubanos —después de muchas décadas de discusión—, el más grande músico que ha dado Cuba en toda su historia. Además, no sólo inventó el mambo, sino que también le dio un gran renombre a México internacionalmente, con sus películas y con su música.”

Las anteriores son palabras que le pertenecen al escritor y periodista Iván Restrepo, encargado de conducir en la Fonoteca Nacional una sesión de escucha por los caminos del compositor cubano, en un auditorio que resultó insuficiente para albergar a las casi 200 personas que acudieron a recordarlo.

“Pérez Prado siempre dijo que el mambo lo había hecho en México, que era producto mexicano: sus raíces, inevitablemente, eran afrocaribeñas, pero gracias al público mexicano, a la comprensión de la disquera de ese entonces, RCA Víctor, y a los músicos mexicanos, él consideraba al mambo como más mexicano que cubano”, aseguró Restrepo, quien estuvo acompañado por la actriz María Victoria, una de las musas del cubano.

Y es que si bien el mambo viene desde los años 30 con los hermanos López, quien le da forma y lo viste es Dámaso Pérez Prado, en 1949, cuando llegó a México de La Habana, donde no le pagaban lo que él merecía, incluso había boicot, “porque no creían que ese nuevo ritmo pudiera ser importante”.

“Lo creían demasiado revolucionario y, afortunadamente, aquí hubo la comprensión de Mariano Rivera Conde, esposo de Consuelito Velázquez y director musical de RCA Víctor, quien le permitió grabar en los estudios lo que quisiera y de ahí para el real”.

En la expo ¡Yo soy! ¿Quién? El rey del mambo hay portadas de discos, libros, fotografías inéditas y documentos personales.