El día esperado para el Papalote Museo del Niño Monterrey llegó. Mañana abrirá sus puertas un recinto cultural innovador por su construcción bajo el subsuelo del Parque Fundidora y por su temática enfocada a promover el cuidado al medio ambiente.
Su construcción demandó 10 años, contando con el apoyo del Gobierno Estatal, Federal, la iniciativa privada y la donación de regiomontanos a través de diversas campañas, para completar la inversión de 550 millones de pesos que demandó el proyecto.
En la semana se ofreció un avance del espacio a cargo de Rodrigo Sánchez Mejorada, presidente del Consejo Directivo; por Marinela Servitje, consejera fundadora, y de José Pérez, director general de Papalote Museo del Niño en Monterrey.
Su recorrido
El museo está pensado para que pueda ser disfrutado desde niños pequeños hasta adultos. Su recorrido es completamente interactivo, contando con 74 actividades que cumplen con el lema “Toca, Juega y Aprende” de Papalote.
La reproducción a escala 1:1 del pliosaurio Monstruo de Aramberri, junto a la osamenta fósil del apatosaurio Einstein, son dos de las piezas monumentales con las que el visitante quedará deslumbrado.
Bajo los conceptos de áreas “Soy”, Pertenezco”, “Expreso”, “Comprendo” y “Comunico”, el museo va ofreciendo distintas actividades lúdicas en sus 2 mil 500 metros cuadrados de exhibición.
“El eje central es conocer al planeta Tierra, sus maravillas y que se entienda que el planeta ha vivido en equilibrio por millones de años y que debemos conservarlo como especie humana”, mencionó Marinela Servitje.
Cuenta con un laboratorio científico donde los niños podrán participar en experimentos, un mariposario donde se podrá interactuar con los insectos además de conocer su proceso de vida.
Se puede jugar con vehículos impulsados con energías renovables, apreciar un acuario durante el recorrido o hacer el súper en la reproducción de un supermercado, pero adquiriendo productos que sean amigables con el planeta.
Estimaciones de los directivos apuntan a recibir a poco más de 400 mil personas por año, buscando contar con un promedio de mil visitantes por día.
Innovación tecnológica
Al ser un museo que se construyó hacia el subsuelo del Parque Fundidora, se requirió de avances tecnológicos enfocados al ahorro de energía en la museografía, control de temperatura y reutilización del agua.
El diseño del proyecto fue obra del arquitecto Iñaki Echevería, contando con el trabajo museográfico de Sietecolores, Ideas Interactivas.
“Para ser congruentes con el mensaje del museo, hicimos un edificio que fuera sostenible y no fue fácil. Es un edificio eficiente energéticamente”, destacó Marinela Servitje.
Como ejemplo, los recubrimientos en paredes y su techo de cristal controlan la temperatura y no depende tanto del aire acondicionado. Además, cuenta con un sistema de tratamiento de agua para no malgastar el recurso vital.
En la parte externa cuenta con un Jardín de Servicios Ambientales, diseñado con el apoyo de la Facultad de Ciencias Forestales de la UANL, donde se ubicará flora característica de los ecosistemas de Nuevo León, así como plantas medicinales.
¿Por qué su precio?
Al anunciarse el costo del boleto de ingreso, fijado en 269 pesos por persona, los directivos del espacio señalaron que el museo cuenta con una amplia gama de recursos tecnológicos para su operación, que no son sencillos de costear.El costo de ingreso contempla el recorrido por todo el museo y el ingreso a la Megapantalla IMAX, para disfrutar de alguna de las tres películas en cartelera.
"Monstruo de Aramberri", pieza estrella
El rey prehistórico de Nuevo León cuando estaba bajo el mar, el pliosaurio bautizado como Monstruo de Aramberri, regresó para recuperar su legado y es la pieza estelar del Papalote Museo del Niño de Monterrey.
Se trata de una réplica a escala 1:1 (18 metros de largo y colmillos de 30 centímetros), realizada por la empresa catalana QOTaller Natura i Museografía SL y que se instaló a comienzos del 2017.
Es la primera vez que los regiomontanos podrán apreciar al reptil marino tal como pudo ser hace más de 150 millones de años, cuyos fósiles se descubrieron en el municipio de Aramberri en 1985 y despertaron asombro de la comunidad científica mundial por sus dimensiones.
El Monstruo de Aramberri es la pieza central en las rampas de ascenso y descenso del Papalote Monterrey, en las paredes adyacentes se explicará la historia del reptil, de cómo era Nuevo León bajo el mar y se exhibirán réplicas de fósiles marinos descubiertos en Vallecillo.