a subasta prevista para hoy en París de máscaras de las tribus amerindias Hopi y Apache San Carlos tendrá lugar pese a la petición de la embajada de Estados Unidos de que se suspendiera, anunció la empresa de remates EVE.
La embajada estadunidense solicitó el sábado a esa empresa, en nombre de las dos tribus, que suspendiera la venta "para identificar los objetos, verificar su procedencia y determinar si pueden reivindicarlos en base a la Convención de la UNESCO de 1970 sobre la exportación y la transferencia de bienes culturales o de cualquier otra jurisdicción."
Sin embargo, EVE indicó el lunes haber respondido el domingo "que por una parte la tribu Hopi tuvo la posibilidad de hacer valer sus argumentos ante el juez y que su solicitud fue rechazada".
Por otra parte, "se registró un intercambio de correos al respecto con la tribu Apache San Carlos, en los que se indicaron los motivos de la subasta", agregó EVE.
"La venta tendrá lugar por lo tanto dentro la más estricta legalidad", concluyó el tasador, Alain Leroy, en un comunicado.
El viernes pasado, la solicitud de la asociación de defensa de los pueblos aborígenes Survival International pidiendo la suspensión de esta subasta de 25 máscaras Hopi fue rechazada por la justicia francesa. La demanda de la tribu hopi para actuar fue declarada inadmisible.
En abril pasado, la misma ONG intentó en vano impedir una venta similar. La justicia consideró que las máscaras no podían ser asimiladas a un cuerpo humano susceptible de ser protegido.
Las máscaras, consideradas sagradas y llamadas "katsinam", son utilizadas por los bailarines de la tribu durante las ceremonias religiosas, generalmente prohibidas a las personas del exterior.
La tribu Hopi tiene, según las estimaciones, entre 8 mil y 18 mil miembros, que viven en el noreste de Arizona, en Estados Unidos.