El Museo Arocena de Torreón abrió sus puertas a la exposición “Origen y sentido” con obras de Pelegrín Clavé (1811-1880), español nacido en Barcelona que arribó a la capital mexicana para ser pieza clave en el impulso la producción pictórica posterior a la lucha de Independencia, que dejaría una nueva de pintura mexicana a partir del siglo los finales del siglo XIX.
La muestra itinerante pertenece al Museo Nacional de San Carlos, del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura y estará en Torreón para deleite de los laguneros a partir de este jueves 25 hasta las primeras semanas de mayo del próximo año, si las condiciones epidemiológicas lo permiten.
Mireida Velázquez, directora del Museo Nacional de San Carlos, compartió que Pelegrín Clavé es uno de los pintores fundamentales para la creación de una nueva generación de pintores mexicanos como José María Velazco, José Salomé Pina o Petronilo Monroy, que a su vez serían maestros de Diego Rivera, Clemente Orozco o David Alfaro Siqueiros.
“Gracias a Pelegrín Clavé y a todas sus enseñanzas, se pudo ir conformando una escuela mexicana de pintura. Es momento para conocer sus obras para los que no lo conocen en La Laguna”, compartió la directora Velázquez y añadió que la exposición se presentó en el Museo Nacional de San Carlos en 2019.
Asimismo, Pelegrín Clavé fue alumno de dos pintores muy importantes: Federico Madrazo, retratista de la monarquía española y Dominique Ingre, retratista francés de diferentes monarquías, por lo que al llegar a México fue solicitado por conservadores.
Mariano, joven guía de la exposición Origen y Sentido, se encargó de explicar el recorrido del arte de Clavé por el Arocena, desde sus inicios y bocetos simples hasta piezas que muestran las habilidades que llegaron para quedarse en territorio mexicano, tal como ocurrió con las pinturas tipo retrato que realizó a personajes pudientes de la época.
Luego de estudiar en la Academia de San Lucas, en Roma, Italia, Clavé fue requerido por la Academia Nacional de Bellas Artes (Antigua Academia de San Carlos) en 1846 para dirigir el área de pintura, un hecho que cambiaría la visión del arte en los artistas mexicanos con innovaciones en clases de paisaje y perspectiva al mandar traer óleos y grabados desde Europa.
La muestra presenta bocetos inacabados, dibujos al desnudo, gestos de personas, lo difícil de dibujar un rostro y una mano, con los inicios de la fotografía como influencia en sus trabajos, luego la exposición es guiada hacia la época en que arribó a México a la Academia de San Carlos fue la primera academia de Latinoamérica y la segunda a nivel América.
EGO