Del arte sacro a las propuestas de diseño consideradas de vanguardia, el Museo Arocena retoma las actividades presenciales de manera gradual para atender a grupos de amigos o familias con niños en las salas de exposiciones permanentes y temporales.
La directora Fabiola Favila Gallegos, apuntó que bajo su dirección se pretende continuar con la tradición del museo en cuanto al fortalecimiento del proyecto educativo dando un sello distintivo en los contenidos diseñados para el público con enfoque comunitario y social.
“Estoy muy agradecida con esta encomienda y responsabilidad. Inicio este nuevo proyecto de trabajo dándole continuidad a muchas cosas que se venían haciendo desde la anterior administración con la maestra Ramos, que se venían haciendo muy bien y que vale la pena seguir trabajando".
“De las cosas nuevas que pretendo fortalecer, digamos porque ya existen, son los programas públicos destinados a nuestra comunidad, somos una institución que se debe a los habitantes de la comunidad y mi interés es el fortalecer cada vez más este tipo de proyectos: los educativos, los públicos, los comunitarios, los sociales”.
De esta forma dejó claro cuál será su objetivo e indicó que los medios siempre serán las exposiciones y las colecciones del Museo Arocena. Si bien la pandemia frenó las actividades presenciales, ahora se retoman de forma paulatina.
“La pandemia nos tomó por sorpresa, como a todos. Teníamos nuestro calendario tanto de actividades como de exposiciones armadas, organizadas como siempre y cuando llegó la contingencia, aún y a la distancia, con el museo cerrado y todos trabajando desde casa, logramos organizarnos de una forma muy efectiva como equipo y reaccionar rápido y bien”.
De la crisis, visualiza Fabiola Favila, se abrió la posibilidad de llegar a más públicos a través de las redes sociales y la virtualidad. Y estos formatos, si bien por algunos se percibieron aún con fallas técnicas, al ser perfectibles, han llegado para quedarse.
“Hemos crecido en redes sociales de una manera impresionante, muy importante. Hemos llegado a gente que ni nos imaginábamos, por ejemplo niños que tomaron el curso de verano el año pasado de todo el país y en el extranjero. Los talleres de invierno que también fueron digitales llegaron a países europeos y de América Latina".
“Una actividad presencial, que también tiene muchas cosas positivas y trabajar directamente con el público es algo que nos gusta mucho y lo extrañamos, no se dejará de hacer por siempre. Y finalmente la posibilidad de la virtualidad te hace llegar lugares inimaginables y nos ha sorprendido de una manera muy grata, lo que nos permite generar dinámicas y estrategias creativas y exitosas en la virtualidad”.
Si bien el Museo Arocena antes de la contingencia sanitaria registró en promedio anual 80 visitantes, la posibilidad de captar nuevos públicos a través de la virtualidad es muy amplia, en contraste con las cifras que arrojó el aislamiento en casa por pandemia durante el año anterior, cuando el recinto cerró con solo 3 mil visitantes, cifra drástica en contraste.
De esta forma continuarán trabajando en la página de internet del Museo Arocena así como las redes sociales, a donde se trasladaron actividades presenciales registrando un impacto mayor. Ejemplo de ello, los Círculos de Lectura o, la participación del actor clown Erón Vargas que presencialmente mantenía un público de alrededor de 300 personas que prontamente multiplicó en cifras de miles.
“El segundo paso será hacer actividades híbridas porque definitivamente hay cosas que llegaron para quedarse. Vamos a tener que evaluar los proyectos porque Cuadro x Cuadro está también en Facebook por medio de un grupo de cinéfilos que si no están inscritos, los invito para que puedan tener acceso inmediato a las cápsulas comentadas.
“Todavía estamos en proceso de evaluación sobre los contenidos y las comunidades que se han generado para cuáles se quedarán en la virtualidad, cuáles serán híbridas y cuáles regresarán al formato presencial”.
EGO