Sin ejercer imposición a grado de generar violencia, el presionar a los hijos para que conozcan y desarrollen alguna disciplina rinde frutos y de ello hablan los músicos Shalom y Josafat Gallegos, quienes junto a maestro Sergio Carrillo se presentarán este miércoles con 'Rev Jazz Trío' en 'Raíces Cowork' de Torreón.
El concierto será este miércoles 18 de diciembre a las 21:00 horas, en el lugar ubicado sobre la avenida Matamoros 127.
La admisión general al concierto es de 150 pesos y los boletos están disponibles en Raíces Cowork y en Boletia.com.
Shalom tiene 18 y Josafat alcanza los 24 años y comentan que han sido muchos los maestros a quienes les agradecen el arte de enseñar a descifrar el lenguaje de la música y poder darla a conocer en otras regiones del país.
Es Shalom quien apuntó, la propuesta para presentarse dentro del Ciclo de Jazz y Música del Mundo que promueve el Instituto Municipal de Cultura y Educación, surgió de uno de sus organizadores. Antes se habían presentado en foros como Morelear gracias al apoyo de Raúl Jáquez, quien ha sido un promotor activo de la música en la región.
Este joven se mantiene activo y en Instagram ha realizado ejercicios de composición.
“Vamos a tocar música de Herbie Hancock, y música mía o propia. Vamos a tocar de un trompetista americano que se llama Roy Hargrove, él murió el año pasado pero su música es muy especial, aunque la gente no tenga esa costumbre de escuchar jazz es muy digerible y entonces creo que les va a gustar”.
Por su parte Josafat explicó que su pasión es la batería. Él y su hermano comenzaron a estudiar música desde temprana edad y aunque reconoce que fue algo que siempre les llamó la atención, siendo niños recibieron un poco de presión por parte de su padre, quien se dedicaba a tocar el órgano en su iglesia.
“Mi hermano y yo empezamos desde muy temprana edad con la música, fue algo que siempre nos llamó la atención, algo que siempre quería despertar la pasión dentro de nosotros. Estamos muy contentos por tener esta oportunidad, siempre es un gusto estar aquí en nuestra Comarca, ya hemos tenido la oportunidad de salir fuera, de tocar en ciudades como Guadalajara, Monterrey, Tijuana, California, en Phoenix.
Siempre va a ser muy emotivo tocar en nuestra región, es una emoción muy grande porque se trata de la ciudad donde crecimos, donde conocimos a nuestros primeros maestros y de verdad estamos muy contentos por tener esta participación”.
SON MÁS CONOCIDOS FUERA DE LA LAGUNA
Aunque Shalom asegura que existen personas que como músicos los aprecian en la Comarca Lagunera, por momentos han sentido que “aquí ya no nos escuchan”, sin embargo, mantienen en mente que deben seguir promoviendo la música en su casa y en otras regiones del país.
Y es que ese amor fue inculcado desde casa. Primero como una disciplina que debían explorar para poder conocer y abrazar o sencillamente descartarla y para ello probaron algunos instrumentos antes de sentir el llamado del que sería su herramienta de trabajo.
“Mi papá tocaba el órgano en su iglesia y poco a poco quiso involucrarnos en la música porque quería que fuéramos músicos. En mi casa no fue una opción tocar música, era de ley. Recuerdo que el primer instrumento que me mostraron a mí fue el piano y mi papá me enseñó el círculo de Sol y el de Do, fue lo primeritito que empecé a tocar, pero cuando veía a un baterista como que a mí me daban muchas ganas de estar en su lugar y yo le dije a mi papá: ‘Papá yo siento que a mí me gusta más la batería’.
Al principio no quería y me decía que era mucho ruido. ‘Si no te gusta el piano ahí está la guitarra o el bajo’. Pasó el tiempo y me dijo que me metería a unas clases de batería y a buscar una escuela pero le tuve que prometer que estudiaría una hora o dos por día y yo estudiaba cuatro o cinco, pues no le quedó de otra más que aceptarlo y hasta ahorita seguimos aprendiendo”, detalló Josafat.
Dijo que así conoció a maestros particulares quienes le dieron las primeras clases en La Laguna, pero luego se topó con maestros de la talla de Javo Barrera, Iván Núñez y Alex Gómez, tutores que le brindaron experiencia, conocimiento y mucha satisfacción.
Shalom, asegura que al ser niño, por su parte sufría porque no le gustaba ir a clases, pero como su hermano lo dijo, fue algo obligado.
“Ya después le fui agarrando el hilo, yo creo que era cuestión de tiempo. Al inicio yo empecé en la Casa de la Cultura de Lerdo estudiando partituras y música clásica y no me gustaba, mi papá iba a recogerme o pasaba por la clase y yo estaba con un Game Boy, entonces no era un estudio realmente efectivo.
Luego me fui adentrando un poquito. Entré en la Escuela Municipal de Música Silvestre Revueltas, en ese entonces estaba a cargo el maestro Gabriel Robles. Empecé a estudiar y me di cuenta de que había muchas cosas que me llamaban la atención. Me fue gustando, me fue llamando la atención, se me fue dando la composición desde temprana edad y empecé a experimentar estudiando armonía, contrapunto, solfeo, obviamente mi instrumento que era el piano y ahora es lo que me encanta y en lo que trabajo”.
Estos músicos coinciden en que la disciplina, después de invertir tiempo, ofrece frutos, pues aprendieron a amar su oficio y a vivir de él con una enorme satisfacción.
“Mañana estaremos en Raíces a las nueve de la noche, es un lugar nuevo pero es muy bonito, vamos a estar tocando y nos va a estar acompañando nuestro amigo Sergio Carrillo, amigo de años, no vive aquí pero por fechas decembrinas vino a visitar a su familia y se dio esta oportunidad”.
Por su parte el músico Sergio Carrillo, con una sencillez inaudita y un sentido práctico, apuntó que los muchachos son aplicados, los conoce bien y han aprendido el discurso de la música.
Reconocimiento aparte el que le hacen los hermanos Gallegos al maestro Juan Barrios quien los orientó por un tiempo y al igual que Carrillo, les hizo considerar crecer en conocimiento al tiempo en que se generan lazos de amistad pues es así como fluye de la mejor manera el discurso musical.