Cuando Sergio Ramírez llegó a Madrid huyendo de Nicaragua, debido al acoso del gobierno de Daniel Ortega, el escritor realizó muchas entrevistas, pero casi todas se centraron en el tema político.
Sin embargo, Víctor Núñez Jaime, colaborador de MILENIO, decidió explorar el lado más personal y humano de un hombre de ochenta años exiliado por segunda vez en su vida.
Fueron varios meses de seguir al escritor, de entrar en su intimidad, de platicar con Tulita su esposa; el esfuerzo y dedicación del periodista mexicano, rindieron frutos y con El segundo exilio de Sergio Ramírez, publicado en el suplemento Laberinto, ganó el Premio Internacional Rey de España de Periodismo Cultural.
¿Cómo decides elaborar el perfil de Sergio Ramírez?
Cuando llega a España comienzan hacerle muchas entrevistas donde le preguntaban sobre todo por la situación política de Nicaragua, pero a mí me interesaba saber más ¿cómo un señor de 80 años se iba a adaptar a vivir aquí?, dejando el país por el que luchó, el que él construyó y que luego se desmoronó. Me interesó más la cotidianidad de un personaje como él y la manera en la que se adapta a vivir en el exilio.
¿De qué manera el escritor te deja entrar en su mundo?
Me lo presenta Juan Cruz, quizá el mejor periodista cultural que tiene España, y le cuento que quería hacerle un perfil a Sergio Ramírez y necesitaba tiempo con él. Yo quería ver, cómo busca una casa, qué come, cómo se siente al estar lejos de sus hijos, de sus nietos, de su biblioteca y cómo escribe ahora, si es que tiene la mente y el corazón dispuesto para escribir, vamos, ¿cómo es su vida aquí? y Sergio Ramírez fue muy generoso y se abrió en canal, me contó cosas que no había contado y se lo agradezco, porque gracias a eso, gracias la riqueza de los detalles, pude hacer un perfil que ahora es premiado.
¿Cuál crees que es el éxito del perfil que hiciste?
Es la conjunción de tres factores: tiempo para investigar, tiempo para escribir y espacio para publicar, pero esto, desgraciadamente ya no es común en prácticamente ninguno de los medios de comunicación de ahora. Es decir que, ocuparse de un personaje con tanto tiempo, ya no es algo común… por fortuna hay suplementos como Laberinto de MILENIO, donde tienen cabida este tipo de trabajos y lo agradezco mucho.
¿Qué es lo que te atrae del escritor?
Me gusta más el lado humano de Sergio Ramírez, cómo se adapta a un segundo exilio, porque él, se había exiliado antes de la revolución, cuando la dictadura de Somoza y entonces me dijo: “cuando con Somoza yo tenía 30 años y la vida por delante. Hoy tengo 80, por lo tanto, tengo la vida por detrás.
El segundo exilio es totalmente diferente
Primero resaltar eso, el lado humano de Sergio y luego, también, ojalá que el premio sirva también para fijarse en Nicaragua, porque ahora necesita más que nunca la comunidad internacional por toda la situación que está pasando.
¿Cuál fue el mayor reto a la hora de armar el retrato de Sergio Ramírez?
Encontrar la estructura de cómo escribirlo. Tenía mucho material de observación, documentación y charlas con él y con su esposa; el problema era cómo organizo todo esto y me ayudó mucho tener como editor a José Luis Martínez S., además, tengo la enorme suerte de ser un discípulo de Alma Guillermo Prieto, que es la gran maestra de la crónica, yo fui su asistente, aprendí mucho de ella y quizá, por ahí, me viene mi afición por el periodismo de largo aliento.
Haces un perfil abrumador y entretenido
Quería contarlo de una manera que no aburra al lector porque es un texto largo, por tanto no hay que aburrirlo. Entonces, primero me fijé en el lugar donde escribe, porque para Sergio Ramírez, lo más importante es escribir y el lugar donde lo hace y luego contar su historia, su exilio; cómo salió de Nicaragua a Estados Unidos, después a Costa Rica y luego a España, la historia con su esposa y luego, lo principal, cómo busca casa en España, qué come, las visitas al doctor, porque tiene este dolencias cardíacas y todo eso que está en el perfil.
Víctor Núñez Jaime, colaborador de MILENIO, llegó a España para estudiar un máster y se quedó a vivir ante la gran vida cultural de la ciudad, de esto, ya han pasado más de 15 años. Vive en Madrid, un lugar por el que dice, pasa todo el mundo, y se dedicó a hacer entrevistas y artículos culturales.
¿Cómo te sientes en España?
Mucha gente se está viniendo a vivir aquí, ya sea por problemas políticos o porque son un poco como yo, un inmigrante económico. A mí, ninguna situación política me empujó a dejar México, me gusta estar aquí, es muy agradable.
¿Cómo ha sido la experiencia de ser corresponsal?
Todo se lo debo a José Luis Martínez S., él fue el primero que creyó en mí, cuando, incluso, yo estaba estudiando en la facultad. Él me abrió las puertas de Laberinto en 2003, cuando el suplemento acababa de nacer. Comencé a hacer cosas y cuando me vine a España, José Luis me dijo: “Sigue mandando cosas”, el primer perfil que hice fue el de Gay Talese, el periodista estadunidense, hasta que, cuando se rediseñó el periódico, me propuso hacer una columna que se llama Café Madrid, donde cuento cosas que a mí me parecen importantes.
A disfrutar del premio
Este premio lo comparto con todos ustedes y es un premio para MILENIO y gracias a José Luis Martínez S. por haber sido tan generoso con el espacio en Laberinto. Yo pienso seguir contando a los lectores de MILENIO historias y personajes que estén o que pasen por Madrid y ojalá les interese y pasen un buen rato leyendo lo que yo envío desde aquí.
El segundo exilio de Sergio Ramírez, publicado en el suplemento cultural Laberinto, de MILENIO, se puede leer haciendo click aquí.
hc