El clavadista Randal Willars ya dejó atrás el proceso olímpico de Tokio 2020 donde se quedó fuera de los Juegos Olímpicos y a pesar de que obtuvo dos plazas para nuestro país, y ahora se enfoca en la primera competencia de este ciclo de París 2024 y que serán los Juegos Panamericanos Junior de Cali a finales de este mes.
“Ahorita los Juegos Panamericanos Junior es una competencia nueva y el objetivo es lograr el primer lugar para así conseguir el boleto a los Juegos Panamericanos Senior, además de probar los clavados. Mi especialidad es la plataforma, tanto individual como sincronizada, pero también se entrena el trampolín para corregir cuestiones técnicas, y ahora en los Juegos Panamericanos Junior se dará la oportunidad de tirar trampolín y podría lograr un buen resultado”, declaró Willars.
Después de ese certamen el clavadista se enfocará específicamente en la preparación de nuevos clavados, y en el entrenamiento en los sincronizados con una nueva pareja.
“Ahorita el plan de trabajo es que se haga sincronizados con Andrés Villarreal ya que estamos en el mismo equipo de trabajo y ya lleva tiempo que se pensaba hacer esa pareja, entonces se aprovecharía que tenemos el mismo entrenador y hay que ver qué tal nos acoplamos. Si hay clavados que podrían darme un mejor grado de dificultad y pensando en mejores puntuaciones y creo que los intentaré sacar durante el ciclo olímpico, entonces hay varias cosas que se siguen preparando y lo más seguro es que a partir del próximo año ya estaría implementando los saltos”, mencionó.
El bajacaliforniano ha logrado destacados resultados como juvenil luego de obtener la medalla de plata en el Mundial de Kazán 2016, y el oro en los Juegos Olímpicos de la Juventud en Buenos Aires 2018.
Dentro de la categoría senior sus mejores logros han sido en la Copa del Mundo de Tokio 2021, donde obtuvo la medalla de plata en la plataforma individual, y la presea de plata en la modalidad sincronizada junto a Iván García, y con esos resultados le dio dos plazas olímpicas al país, sin embargo, no pudo concretar su lugar en Tokio tras perder en el control interno. Ahora el saltarín siente que en este ciclo ahora si podría cumplir con el sueño olímpico.
“Ya es tiempo de la nueva generación y hay que seguir trabajando para lograr el sueño olímpico. En los últimos meses me he ido recuperando de unas lesiones, sobre todo en la rodilla, y ahora ya he recuperado la forma física. Me falta la estabilidad entre competencia y competencia, el aspecto psicológico para que en cada certamen se puede hacer un buen trabajo, independientemente si estas cansado”, dijo.
FCM