Los Dallas Cowboys quieren una reestructuración en la posición de corredor y ya tomaron una decisión con respecto a ello: los días de Ezekiel Elliott en el equipo ya están contados.
El equipo de la Estrella Solitaria le informó al runningback que será designado como liberado a partir del 1 de junio, con el fin de crear espacio en el tope salarial. La decisión fue reportada por los insiders de NFL Network Ian Rapoport y Tom Pelissero, para confirmarse por la Liga a través de sus redes sociales.
La decisión llega una semana después de que le asignaron la etiqueta franquicia a su otro corredor, Tony Pollard, quien fue el que cargó con la responsabilidad en el ataque terrestre en 2022. Se preveía la salida de Elliott, aun cuando Dallas señaló en público que buscaría la manera de que continuara en el equipo para 2023.
Con 27 años, Elliott tuvo su temporada más irregular con apenas 876 yardas, 231 acarreos y 3.8 yardas por intento, aunque demostró que sigue siendo efectivo en zona roja, al anotar 12 touchdowns, con nueve partidos consecutivos con visitas a más diagonales.
En 2019, los Cowboys le extendieron un contrato por seis años y 90 millones de dólares, pero no pudo desquitar dicho contrato, entre lesiones de rodilla y baja de juego. Zeke entrará a la agencia libre por primera vez en su carrera y se despide de Dallas como tercer mejor corredor en yardas por tierra, por detrás de Emmitt Smith y Tony Dorsett. Eso sí, dejará huella tras una de las jugadas más extrañas en la historia de los playoffs, cuando fue el único jugador en la línea ofensiva y le centró el balón a Dak Prescott, siendo Dallas eliminado en la ronda divisional por San Francisco 49ers.
Con este movimiento, los Dallas Cowboys se ahorrarán 10 millones de dólares en el tope salarial. Además, la etiqueta franquicia de Pollard garantiza una licitación de un año a 10.1 millones de dólares.
AVV