Eli Manning se retiró de la NFL luego de 16 temporadas justo como quería, como un infatigable jugador que siempre vistió el uniforme de los Giagantes de Nueva York y que hizo las cosas a su manera para darle a la franquicia dos títulos de Super Bowl.
Afirmando que no se arrepentía de nada, el quarterback de 39 años puso fin a su carrera de manera oficial el viernes en una atestada conferencia de prensa a la que acudieron sus familiares, amigos, excompañeros y entrenadores. Y dos trofeos Lombardi.
Manning dijo no contar con planes a corto plazo, si bien admitió que extrañaría pasar tiempo con sus compañeros, la preparación y las cervezas en la parte trasera del autobús después de cada victoria. Planea pasar tiempo recordando los buenos momentos, divertirse y hacer el papel de entrenador asistente del equipo de básquetbol de su hija de tercer grado de primaria. Un puesto en los Giants es una posibilidad, agregó.
“Desde el primer momento lo hice a mi manera”, dijo Manning, quien forma parte de una muy reconocida familia ligada al fútbol americano. “No podría ser alguien más que quien soy. Sin duda, habría sido más cómodo para los aficionados, los medios e incluso los directivos del equipo que yo hubiera sido más entusiasta.
“Pero ese no soy yo”, añadió Manning. “Al final, elegí creer que mis compañeros y los aficionados aprendieron a valorar eso. Lo que recibieron fue un Eli en su estado más puro, sin adulterar”.
Los Giants también recibieron a un jugador que prácticamente rompió todas las marcas de la franquicia para un quarterback en una carrera que inició cuando Nueva York lo adquirió en el día del draft de 2004 luego que fuera seleccionado por los Chargers. Guió a los Giants a títulos de la liga en las temporadas de 2007 y 2011, derrotando a los Patriots en ambas ocasiones.
Manning tuvo una racha de 222 juegos consecutivos como titular entre el final de su año como novato hasta finales de la temporada 2017. En su última campaña fue reemplazado por el novato Daniel Jones como el quarterback titular después de tan solo dos compromisos. Sin embargo, cumplió un buen cierre de campaña al ser titular y ganar un partido ante los Dolphins luego que Jones se lesionara en diciembre.