Los New York Jets siguen generando expectativas con la firma del corredor Dalvin Cook, quien se suma a la Gran Manzana con un contrato de un año por $8.6 millones de dólares, una información reportada por Ian Rapoport y Tom Pelissero, insiders de NFL Network.
Se trata de una adición importante para un equipo que está convirtiéndose en un contendiente, ya que Cook fue nombrado cuatro veces al Pro Bowl en su estancia con los Minnesota Vikings, quienes lo cortaron en junio.
El running back se suma a un equipo que es liderado por el veterano quarterback Aaron Rodgers, quien tiene en Allen Lazard, Randall Cobb y Billy Turner a tres de los que fueron sus compañeros en Green Bay Packers, además de que conoce a Cook como rival en la NFC Norte, cada vez que Vikings y Packers se enfrentaban.
Con 28 años, Cook es uno de los mejores corredores de la Liga, tras hilvanar cuatro temporadas de mil o más yardas. En los Jets no han tenido un corredor de tal producción desde Chris Ivory, quien lo consiguió en 2015.
Su llegada a Nueva York también llega como una necesidad ante la recuperación del running back Breece Hall, quien solo jugó siete partidos y tuvo 463 yardas debido a un desgarramiento del ligamento cruzado anterior, por lo que no se sentirá presionado para recuperar el nivel en los emparrillados.
El backfield de los Jets también incluye al corredor de tercer año Michael Carter y al running back Bam Knight, quienes esperan brindar profundidad a este equipo que ha hecho una gran apuesta con Rodgers como su principal adquisición para esta temporada.
Las incógnitas alrededor de Cook son por las lesiones, las cuales le afectaron en sus primeras temporadas. A su favor tiene el hecho de que en 2022 jugó la temporada completa por primera vez en su carrera, con 17 partidos de rol regular y uno de playoffs. En 264 intentos, Dalvin logró 1,173 yardas y ocho anotaciones.
FCM