La ciudad de Tampa, en el estado norteamericano de Florida, se convertirá oficialmente este domingo en sede del Super Bowl por quinta ocasión en la historia. Si bien este juego no es tan frecuente como en Miami o Nueva Orleans, cuenta con dos de los partidos considerados más emocionantes de la NFL.
Entre los aficionados al fútbol americano profesional, las memorias se remontan a 1991, cuando en el entonces estadio de la ciudad llegaban por primera ocasión Los Bills de Buffalo con la gran ofensiva comandada por Jim Kelly ante los Gigantes de Nueva York que contaban con un mariscal de campo suplente como Jeff Hostetler.
Los campeones de la Conferencia Americana eran amplios favoritos, sin embargo, la estrategia del coach Bill Parcells puede tener la posesión del balón la mayor parte del tiempo, lo cual provocó un partido cerrado y disputado hasta el último instante definido por una de las jugadas más emblemáticas de la historia.
Con tan sólo unos segundos el pateador Scott Norwood tuvo en sus pies la victoria para Buffalo, pero su intento de 47 yardas se fue muy abierto a la derecha. Con ello, los Gigantes daban la campanada y se llevaron el trofeo Vince Lombardi por marcador de 20-19.
Nuevamente fue anfitrión del gran partido en el 2009; era la edición 43, ya en el Estadio Raymond James y enfrentaba a los Acereros de Pittsburgh con una gran defensiva contra los Cardenales de Arizona de Kurt Warner y Larry Fitzgerald, duelo con uno de los finales más emocionantes.
Después de mantenerse al frente hasta el tercer cuarto por 20-7, los Cardenales montaron una remontada en el último cuarto de 16 puntos sin contestación. Con dos 2:37 en el reloj, le dejaron la última oportunidad a Ben Roethlisgerber, quien en pareja con el receptor Santonio Holmes lanzaron un último ataque que concluyó con una memorable atrapada en la zona final con 35 segundos.
No todo ha sido emoción y adrenalina, pues en 1984, los Raiders de Los Ángeles apalearon a los entonces Washington Redskins por 38-9. Lo mismo sucedió en el 2001, donde los Cuervos de Baltimore aplastaron a los Gigantes por 34-7.
Todo pinta para que los Bucaneros, con Tom Brady y como locales, Tampa Bay tenga un agarrón ante los Jefes de Kansas City y Patrick Mahomes. Veremos si este domingo, nuevamente la ciudad y el mundo vibra con otro duelo electrizante.