Casi un mes después de su sonado traspaso, Kevin Durant debutó el miércoles con los Phoenix Suns firmando 23 puntos en el triunfo 105-91 ante los Charlotte Hornets mientras los Celtics batieron a los Cavaliers en un duelo estelar entre Jayson Tatum y Donovan Mitchell.
Durant, de 34 años, anotó 10 de sus 15 lanzamientos de campo, comenzando por una sencilla entrada a canasta asistido por Chris Paul con dos minutos de juego en el Spectrum Center de Charlotte.
Dejando su huella en ambos lados de la cancha, Durant agregó también 6 rebotes, 2 asistencias y 2 tapones en 27 minutos en pista.
En un triunfo sencillo de los Suns, Durant comenzó a construir química con las otras figuras del equipo, convertido de nuevo en aspirante a conquistar su primer anillo de la NBA.
El escolta Devin Booker fue el máximo anotador con 37 puntos mientras el veterano base Chris Paul se quedó en 2 puntos (1/8 en tiros) y 11 asistencias.
Tras una frustrante y convulsa etapa de tres años en los Brooklyn Nets, Durant fue traspasado el 9 de febrero a los Suns a cambio de un enorme paquete de jugadores y elecciones de Draft, en la mayor operación del mercado de fichajes.
El alero, ganador de dos anillos con los Golden State Warriors (2017 y 2018) y 13 veces All-Star, no había podido debutar con los Suns hasta ahora debido a un esguince en la rodilla izquierda que le tuvo de baja desde el 8 de enero.
"Tenía muchos nervios. He jugado casi un millar de partidos (en la NBA) pero hoy estaba nervioso", reconoció después Durant.
"Es un nuevo grupo, un nuevo equipo, lo quiero hacer bien, quiero jugar duro para ellos. Estaba pensando en todo eso hoy pero cuando comenzó el partido mis compañeros fueron increíbles en hacerme sentir cómodo y pude hacer mi juego", agradeció.
"Perderse más de un mes de competición es duro pero estoy contento de que mi rodilla está bien y quiero jugar más minutos cada partido", aseguró. "Estoy deseando ver qué podemos construir. Me emociona".
MGC