Larry Bird, tres veces campeón de la NBA e incluido en la lista de los mejores 50 jugadores de la historia en la duela consiguió en los ochenta destacar en una liga dominada por afroamericanos. Su perfil ha sido único hasta hoy en día, innumerables récords y reconocimientos por lo acumulado durante 13 temporadas con los Celtics de Boston. Pero aunado a todo el talento en cancha, había una técnica muy conocida que Larry imponía hacia sus rivales.
No es ningún secreto que la generación del 86’, por ejemplo, amaba el hablar rudo (trash talk) en la cancha para incomodar a los rivales, pero era justo Larry Bird uno de los precursores de esta práctica. No tenía filtros, no tenía misericordia en sus comentarios. Más allá de una estrategia del equipo, era una manera de motivarse y entretenerse durante la larga temporada, una técnica para simplemente no aburrirse, era la manera en que se divertían.
Incluso hay historias de cómo Bird se enojaba cuando el coach rival le mandaba a un jugador blanco a cubrirlo. Charles Barkley recordó un episodio apenas este año de cómo Larry le dijo en un partido que le estaban faltando al respeto por ponerle a un rival blanco. Y así como estas, hay mil y un historias sobre Larry Legend. Algunas suenan muy ridículas, pero puede que en verdad hayan ocurrido, no por nada le han llamado el Chuck Norris de la NBA.
SFRM