Después de nueve años, los 12 Guerreros tuvieron su regreso en una Copa Mundial de Baloncesto organizada por FIBA, pero no se tuvo el resultado deseado y la posibilidad de celebrar la segunda ronda se hace difícil. México no pudo ante Montenegro y cayó por marcador de 71-91 en su primer juego celebrado en Mall of Asia Arena, que se encuentra en Manila, la capital de Filipinas, que junto con Japón e Indonesia albergan este certamen internacional.
Sí, esta derrota compromete al combinado nacional que dirige Omar Quintero, ya que solo los dos primeros de grupos avanzarán a la segunda fase, mientras que los equipos que terminen terceros y cuartos tendrán que jugar una fase de clasificación, la cual sólo servirá para definir los lugares que se ocupen en el torneo.
Pako Cruz fue el líder anotador de México, con 16 puntos en 35 minutos y 17 segundos de actividad. Logró esa cifra con siete de 14 tiros de campo, siendo efectivo en seis de sus diez canastas de dos puntos intentadas, solo uno de cuatro triples convertidos, acertó uno de dos tiros libres y también consiguió tres rebotes, seis asistencias, cometió dos faltas, perdió el balón cinco veces y acabó con un más/menos de -17.
Por parte de Montenegro, Nikola Vucevic fue el artífice de la victoria; el pivot de Chicago Bulls logró 27 puntos en 30:34 de tiempo jugado, en los que completó 11 de 15 disparos (ocho de 12 dobles, sus tres tiros en el perímetro), con el extra de dos canastas desde la línea de libres; además, logró el doble-doble con 10 rebotes, tuvo una asistencia, un robo, dos tapones, provocó una falta y tuvo dos entregas para un más/menos de +26.
Después de un inicio parejo de 19 puntos en el primer cuarto, el encuentro se inclinó para los europeos en el segundo periodo, en el que tomaron ventaja de nueve unidades y no la soltaron (39-48). Para el tercer cuarto, México intentó responder para no rezagarse, pero los montenegrinos tomaron la ventaja de dos dígitos(58-68) y el último cuarto fue imposible, con un parcial de 13-23.
La clave llegó en los triples, con 45.20 por ciento de efectividad para Montenegro, contra el 31.60 por ciento de México; los 35 rebotes europeos contra 28 de los 12 Guerreros, además de los puntos desde el banquillo (36 de Montenegro contra 14 de la selección mexicana) fueron un parteaguas para el resultado. La lucha en los tableros fue clave, incluso los balcánicos sumaron 14 unidades en segunda oportunidad, con México quedándose con las manos vacías.
El siguiente encuentro de la selección mexicana es contra Lituania, número 8 del mundo. El triunfo es obligado, porque de ahí depende el sueño de jugar la siguiente ronda.
FCM