Sigue el control absoluto del Heat de Miami sobre Trae Young. El estelar base no ha podido despegar completamente en estos playoffs con los Hawks de Atlanta, que cayeron ante el Heat por 110-86, con lo que Miami se coloca 3-1 en la primera ronda de postemporada.
La segunda mejor ofensiva de la NBA en temporada regular está a punto de despedirse: los de Florida limitan la producción de Young, quien apenas promediaba 9.7 penetraciones y cinco puntos por esta vía en la serie, muy lejos de aquella cosecha de 17.3 y 10.0 de puntos conseguidos por el mismo método en temporada regular.
Por el contrario, Jimmy Butler se consolidó como un peligro bajo la pintura y acabó el juego con 36 puntos, producto de 12-21 en tiros libres, 1-2 en triples y un sólido 11-12 en los tiros libres. Consiguió un doble-doble con diez rebotes, además de conseguir un tapón, cuatro asistencias y el mismo número de robos, con solo una pérdida.
Trae Young apenas terminó el juego con nueve puntos y cinco asistencias, con tres aciertos de 10 intentos, sin un solo doble convertido y un fallo en su única visita a la línea de castigos. Si neutralizas al mejor jugador del rival, es difícil que reaccionen. Tal fue el caso de Victor Oladipo, uno de los encargados de cubrir al base y que consiguió seis puntos aceptables, pero destacó en defensa con ocho rebotes.
De’Andre Hunter (24 puntos) puso en la pelea a los Hawks en el primer cuarto, con una certeza desde más allá de la línea de tres puntos, lo suficiente para cerrar el primer cuarto con ventaja de 26-25. Pero se terminó esa buena racha y fueron limitados a 15 puntos en el segundo cuarto, 20 en el tercero y 25 en el último, ya cuando no había forma de remontar.
El Heat consiguió resultados de 30, 25 y 30 puntos en los tres cuartos siguientes, demostrando su poderío en la duela y una defensiva implacable.
Será el martes cuando los Hawks de Atlanta busquen mantenerse con vida en la serie, en tanto el Heat querrá finiquitar la serie y avanzar a Semifinales de Conferencia.
ZZM