Las tendencias cambiaron en los últimos días y se confirmaron los pronósticos finales: Zaccharie Risacher fue el primer elegido por los Atlanta Hawks en el NBA Draft 2024. Fue en los meses anteriores que Alex Sarr figuraba como el elegido inicial de la noche, pero al final los Hawks se decantaron por otro francés.
Se trata de una generación diferente la de este año. Normalmente en el Draft lo que se busca son talentos que marquen diferencia y que sobresalga por encima del promedio. Jugadores con gran atletismo, buenas habilidades en defensa, fuertes recursos ofensivos, buen pase y capaces de crear el juego. Muchos suelen tener más de una de estas características, en tanto otros sobresalen en específico en una.
Pero el caso de Risacher, de 19 años, es diferente. Este año los analistas deportivos lo ven como un jugador sólido, pero sin una virtud en particular que le dé una proyección temprana como para convertirse en una de las grandes figuras en la NBA.
Cuenta con 2.09 metros de estatura, aunque no destaca por su físico, al tener brazos y manos pequeñas. Sus 90 kilogramos de peso no lo hacen un jugador con potencial físico como para que este alero pelee en la pintura, por lo menos en lo que a las primeras proyecciones se refiere.
Con el JL Bourg francés, Zaccharie Risacher representó el 22.4 por ciento de uso de su equipo, muy bajo al que tuvo Markelle Fultz (31.4 por ciento), primer elegido del Draft de 2017 por Philadelphia 76ers, en su etapa universitaria con Washington. Anthony Edwards, primer elegido en 2020 por Minnesota Timberwolves, tenía un porcentaje de uso del 30.4 con Georgia en NCAA. Una gran diferencia con respecto al francés.
Con base en este porcentaje, Zaccharie tiene un panorama difícil para acostumbrarse al mejor basquetbol del mundo, ya que no tiene esos porcentajes como para ser considerado el principal hombre del ataque, por lo que deberá acostumbrarse al juego en Estados Unidos para tener una rápida adaptación y no ser considerado un jugador que se limitó a ser de rol o que no cumplió con las exigencias de un primer pick.
En su última temporada terminó con promedios de 10.1 puntos, 3.8 rebotes, 0.9 asistencias, 0.8 robos y 0.5 tapones, además de que jugó como profesional desde 2021 y promedió 7.4 puntos, 2.7 rebotes, 0.8 asistencias, 0.7 robos y 0.3 bloqueos. Su enfoque deberá ser mejorar sus números y su físico para que su aporte en Atlanta sea el mejor.
RGS