El lanzador tapatío Alemao Hernández culminó su año deportivo levantando el trofeo de campeón con los Tigres de Licey en la Liga de Beisbol Profesional de la República Dominicana.
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Tras culminar su actividad en la Liga Mexicana del Pacífico, llegó al Caribe como refuerzo de Águilas Cibaeñas para el Round Robin, para después reforzar en la final a los felinos que se coronaron en cinco duelos a las Estrellas Orientales. Hazaña que fue el premio a su esfuerzo luego de un cierre complicado con Diablos Rojos debido a una lesión, la temporada irregular que tuvieron los Charros y aventurarse a atender su primer llamado como refuerzo en una liga extranjera.
¿Cómo te encuentras en este momento?
Fue una gran experiencia a mi corta edad (23 años), nunca me imaginé hacerlo a estas alturas de mi carrera, a veces no encuentro la explicación del sentimiento que tengo ahorita sobre todo porque la liga es de muchos jugadores de Grandes Ligas, jugadores con mucha experiencia y es una liga muy fuerte.
¿Cuándo te dijeron que abrirías el quinto juego contra Estrellas Orientales?
Cuando me agarraron de refuerzo todos pensaban que yo iba en los primeros tres abridores pero yo lo veía difícil porque en todos lados hay caballos y en los Tigres de Licey hay gente con mucha jerarquía. El cátcher, Jesús Sucre, me estuvo cachando en Diablos en México y hubo muy buena química, él recomendó que me trajeran para Tigres y dije se me va hacer más confianza aún pitchear con él atrás. El domingo por la noche me dijeron que yo iba el miércoles para el juego 5 pero no la creí tanto porque teníamos que ganar el martes. El equipo hizo el viaje a San Pedro y yo me quedé aquí en la capital, ya cuando vi que ganamos dije ‘me toca el decisivo aquí en casa’. Estar en casa es especial por la afición y el ambiente y yo quería pichear en el Quisqueya porque es un estadio histórico, un equipo histórico y el ayudar a ganar la corona 23 a los Tigres de Licey es como un honor y un privilegio ser parte de la historia.
¿Hubo algún momento de nervios porque dependía en gran parte de tu salida?
Me fui seis horas antes del juego, normalmente acostumbro irme tres o cuatro. En lo personal estaba tranquilo escuchando música y riendo con los compañeros. Mi preparación para abrir comienza una hora antes y ahí mi adrenalina ya estaba a mil, a tope, no me la creía. Cuando yo salí a la línea para empezar mi calentamiento no sentía los pasos, sentía como si pisara en grande. Y cuando voy hacer mi primer lanzamiento tomé un respiro y ahí como que saqué todo, dije ‘tengo que tranquilizarme’, pero me quedé todavía un poquito con esa sensación.
¿Hubo interés de quedarte en Dominicana?
Los fanáticos y la gente de Águilas Cibaeñas están contentos del trabajo que hice con ellos, aunque se quedaron como con ese saborcito de que pudiera lanzar en casa porque solo me tocó fuera, tanto allá como aquí en Tigres me hicieron sentir en casa, me agradecen por darles la corona, apoyar, es un sentimiento muy bonito que te arropen de esa manera, ellos piden que me venga desde octubre pero es prácticamente imposible.
CIFRA
5
Entradas lanzó Alemao Hernández en el Juego 5 de la final. Recibió siete hits sin carrera ante 21 bateadores.
SRN