Hay ilusiones en los Marineros de Seattle por llegar a playoffs. Con foja de 81-66, los del estado de Washington son –sin contar a los Astros de Houston y su banderín divisional– los únicos en el Oeste de la Liga Americana con posibilidades de calificar a postemporada, instancia que no conocen desde 2001, cuando alcanzaron el Juego por el Campeonato de la Liga Americana.
El ánimo está por los cielos y así lo reconoce Andrés Muñoz. “Aunque tengo solo dos años aquí, todos tenemos ganas de romper esa marca de más de 20 años sin playoffs, queremos volver a pelear, nos ilusiona mucho. Las vibras en el Clubhouse son muy altas. Estamos trabajando duro para volver”, reconoció el relevista mexicano en conferencia de prensa virtual con medios mexicanos.
De la incertidumbre en San Diego a la consolidación en Seattle
Andrés Muñoz firmó con los Padres de San Diego en 2015 como agente libre internacional. Estuvo en sus sucursales hasta 2019, cuando jugó 22 encuentros con el roster principal, pero para 2020 fue canjeado a los Marineros de Seattle. Reconoció que fue un golpe duro para él, pero también quiso aprovechar la oportunidad para encontrar su mejor juego y demostrar su valía en las Mayores.
“Es la parte más difícil: que te cambien estando lesionado te da un bajón, porque no tienes nada con qué defenderte. Me dio un bajón, pero también lo vi como una nueva oportunidad, que el equipo está en reconstrucción y una oportunidad de establecerme en Grandes Ligas, me dio la intención de trabajar más”, aceptó.
Y este año, el primero para el oriundo de Los Mochis con regularidad, ha sido un camino de muchas enseñanzas. Dejar en claro que la confianza por tenerlo en el roster principal era respondida cada vez que visitaba la lomita y ayudar con los ponches necesarios para su equipo.
“La verdad ha sido de mucho aprendizaje, de tanto cómo manejar una temporada completa, cómo prepararse… los errores que comete uno durante el juego, van siendo menos. Eso es lo que te va dando la experiencia, del tirar todos los días”, dijo Muñoz, quien lleva 58 juegos, con efectividad de 2.61 en 58.2 entradas trabajadas y 90 ponches, con proyección a 120 chocolates una vez que concluya la temporada regular.
Actualmente, presume de uno de los brazos más fuertes en el bullpen de los Marineros, con lanzamientos que alcanzan las 100 millas por hora, Andrés recordó cuándo fue la primera vez que alcanzó esas velocidades y cómo el ser multidisciplinario le ayudó en su desarrollo como pelotero profesional.
“La primera vez (que superé las 100mph) fue a los 17 años, cuando firmé con San Diego. Ha sido un proceso de afinar la mecánica, trabajos explosivos, trabajos en el gimnasio… antes de hacer esto del beisbol hacía atletismo y natación. Fue una combinación de todo para fortalecer mi físico”, compartió.
“Para mí, siempre me gusta cuando alguien lanza duro. Desde que me acuerdo, mi jugador favorito fue Aroldis Chapman. Hace poquito pude jugar con él y fue una ilusión enorme. El verlo de chiquito y luego jugar en el mismo estadio, es una ilusión. De mexicanos veía muchos videos de Joakim Soria, lo conocí y aprendí mucho de él”.
Dispuesto para el Clásico Mundial de Beisbol
La pregunta obligada de la actualidad. No son pocos los peloteros que desean formar parte de la selección mexicana para la competencia internacional. De momento no hay nada concreto, pero sí ha hablado con Rodrigo López, gerente general de la selección.
“Sí he hablado con él, pero simplemente para preguntarme cómo estoy. Obviamente yo he dicho que sí, a mí me interesa ir, pero ya me hablaron y todo, pero todavía no puedo confirmar nada, porque hay que ver cómo terminar la temporada”.
OMCS