El agridulce paso de Benjamín Gil al frente de la Selección Mexicana de Béisbol deja una nube de incertidumbre sobre el rendimiento que demostró el equipo, pero además de cuestionar su trabajo en el banquillo, deja suelta la hebra como oportunidad de desenredar la madeja del proceso que involucra la conformación del equipo nacional e identificar los posibles cabos sueltos que llevaron a México de una participación histórica en el Clásico Mundial a uno de los peores resultados en contra con la derrota 12-2 ante Estados Unidos en el Premier12.
Fue a mediados del 2021 cuando se anunció a Benjamín como manager de la selección que participó en Tokio 2020, ante la baja repentina de Juan Castro quien denuncio poco apoyo hacia el equipo.
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Para ese entonces acumulaba cuatro títulos con Tomateros de Culiacán en la Liga Mexicana del Pacífico, que lo convertían en el manager más ganador de los últimos años.
Un mes después de asumido el cargo y con dos juegos de preparación como fogueo, comenzó la aventura en Tokio que terminó siendo una pesadilla pues la novena tricolor se regresó descalabrada 0-3, que incluyó una aplastante derrota de 5-12 ante Israel.
Pero el trabajo de “El Matador” dejó buenas impresiones y se le refrendó la confianza para el Clásico Mundial de Béisbol.
Joey Meneses, Isaac Paredes, José Urquidy, Randy Arozarena y Patrick Sandoval; son algunos de los elementos que conformaron el roster, certamen en que se repusieron de un mal inicio para lograr la participación histórica finalizando en 3-1 la primera ronda con triunfos de 11-5 sobre Estados Unidos y 10-3 a Canadá.
El poderío mexicano solo pudo ser frenado por Shohei Othani que se encargó de despacharlos en semifinales, pero la actuación mexicana los llevo a dar el salto al top 3 del ranking mundial por primera vez.
Y también por vez primera, el béisbol mexicano tomó protagonismo y en respeto al proceso se optó por continuar con Gil para afrontar el Premier12, pero las circunferencias fueron totalmente distintas.
México desaprovechó la localía, batalló con el pitcheo y los toletes no lograron aparecer, la historia culminó con el 12-2 ante Estados Unidos para un récord de 2-3.
El balance que deja Gil en las tres competencias internacionales es de 6-8.
La continuación de procesos toma relevancia cuando se obtienen resultados, por ello es incorrecto y un poco injusto, señalar a Gil como el principal responsable cuando solo cinco elementos se repiten en el roster de aquella soñada participación: Alan Trejo, Jesús Cruz, Gerardo Reyes, Wilmer Ríos y Víctor González.
Existen al menos dos vertientes más a cuestionar, cuántos de los convocados se encontraban activos y en forma y cuántos más se quedaron retenidos por sus clubes ante la necesidad de resultados en sus propias ligas, aspecto que parece ser recurrente en el proceso de selección pues Juan Castro, ex manager nacional dio pistas de ello.
La incertidumbre proviene también del área administrativa, qué condiciones no han sido compatibles entre la organización, y qué desacuerdos podrían ser los responsables de la repentina salida de Rodrigo López, Mariana Patriarca y Jorge Campillo, a un mes de realizarse el Premier12.
JMH