Más allá de las matemáticas y el Team Quelity Balance que fue lo que destrabó el triple empate entre Cuba, México y Venezuela, a los Charros de Jalisco les costó derecho de piso su primera participación en la Serie del Caribe.
Tras el triunfo de 3-0 Leñadores de Cuba sobre Cardenales de Lara, Charros anunció su despedida del torneo, que si bien esperaban un gran nivel por parte de sus rivales, lo que terminó por eliminarlos fueron las dos derrotas en los dos primeros juegos.
Un equipo acostumbrado al poder en el bat en un campo a más de mil 500 metros de altura tuvo que competir a uno totalmente distinto: de pelota chica, infield hits y en donde el viento jugaba totalmente en contra de la ofensiva, por lo que la pelota no corría en los elevados.
El estadio Rod Carew hizo que la novena de Roberto Vizcarra cambiara su estilo forzosamente. El primer juego lo perdieron 5-1 y el segundo 3-1. Dos carreras a la ofensiva en los dos primeros juegos sentencian a cualquiera.
Pero en la defensiva también tropezaron los caballos y los relevos titubearon. Los hombres más seguros que tuvo Jalisco en la Serie Final donde ganaron el título de la Liga Mexicana del Pacífico fueron maltratados. Orlando Lara solo lanzó 3.2 innings de dos hits, dos carreras y dos base por bola. Will Oliver fue golpeado por Cuba en el segundo, con 4.2 entradas de seis hits, tres carreas y una base por bola. Ambos perdieron los duelos.
El rival también cuenta. Y qué rival. Néstor Molina (Venezuela) y Lázaro Blanco (Cuba) maniataron a la ofensiva mexicana. Dos de los mejores pitchers le cayeron en fila. En dos días fueron 12 imparables y dos carreras, cosecha muy baja para un equipo acostumbrado a los tablazos.
El día de descanso sirvió a México para ver errores y corregir.
En el tercero ante Cuba, la fortaleza de México fue el pticheo. Una buena salida de Manny Barreda apoyado por el relevo corto y un gran Sergio Romo mandó el juego a extrainnings donde definieron en el décimo primer rollo.
Pero lo que más necesitaba México eran carreras pensando en un triple empate y en donde entre más anotaras, más posibilidades tenías.
Por ello solo le quedaba hacer un juego inteligente y agresivo en donde desde el principio mandó el mensaje de que iba por el triunfo y las carreras. Con bateo oportuno, un cuadrangular de Víctor Mendoza, México le hizo 15 imparables a Venezuela y lo venció 9-4, carreras que al final serían insuficientes.
“Este equipo está acostumbrado a venir de atrás”, señalaba Agustín Murillo tras el triunfo del jueves. Y aunque Jalisco se levantó de la racha negativa, por carreras no le alcanzó para otra nueva hazaña. Aunque los tres tuvieron dos victorias y dos derrotas, el Team Quality Balance le dio el boleto a Cuba.
Criterio de desempateFórmula Cuba México Venezuela
Carreras anotadas (÷) 8 14 10
Entradas ofensivas (-) 37 37 34
Carreras recibidas (÷) 5 14 13
Entradas defensivas (=) 37 37 34
Team Quality Balance 0.081 0 -0.088
MC