Los Diablos Rojos lo volvieron a hacer. Un rally de ocho carreras en la quinta entrada encaminó al México a un triunfo por 17-0 sobre Sultanes de Monterrey en el Juego 2 de la Serie del Rey, con lo que la pandilla escarlata está a la mitad del camino para conquistar la Liga Mexicana de Beisbol por decimoséptima vez en su historia.
Erick Leal encontró la reivindicación: tras dos malas aperturas en playoffs, la tercera fue la vencida con ocho abanicados, una base por bolas y dos hits en su cuenta para apuntarse la decisión en 6.1 entradas. A la ofensiva, Julián Ornelas comandó los bates con dos palos de vuelta entera, cinco remolcadas y tres anotadas.
Tyler Viza tuvo una salida fatídica con solo cuatro entradas y un tercio de labor por los Fantasmas Grises. El diestro de Phoenix cargó con el descalabro al tolerar nueve imparables (dos cuadrangulares) y siete carreras, seis de ellas limpias; además, solo tuvo un ponche y dejó en 5.06 su efectividad. El relevo volvió a fallar y la ofensiva fue contenida con solos tres inatrapables.
Por cuarta vez en la temporada, Diablos anotó ocho carreras en una entrada, quedándose cerca de su mejor marca: fue el 12 de julio cuando le metieron nueve carreras a Guerreros de Oaxaca en la segunda entrada, precisamente en el estadio Alfredo Harp Helú. Una producción intensa del conjunto escarlata, que pone a Sultanes en un escenario adverso para buscar cuatro triunfos en los cinco juegos restantes de la serie y la urgencia de responder desde este sábado en su casa, el Estadio Mobil Super.
Ataque tempranero
La ofensiva roja explotó en el segundo inning y Viza fue el que sufrió por Monterrey. José Pirela se embasó por un error de Roberto Valenzuela y llegó a tercera gracias a un doble de Juan Carlos Gamboa; ambos fueron remolcados por un cuadrangular de Arístides Aquino, el segundo para él en estos playoffs.
Ornelas también estuvo encendido con el tolete y voló la pelota hacia el jardín derecho, con lo que la ventaja llegó a cuatro carreras. La amenaza pudo ser mayor, pero José Marmolejos bateó un elevado de out y dejó varados a Patrick Mazeika y Robinson Canó en las esquinas.
Quinto inning decisivo
La noche se le fue encima a Viza y Monterrey ya no se recuperó. Canó, Marmolejos y Pirela se pusieron en circulación y el Haper Gamboa remolcó la quinta rayita. Los ajustes fueron obligados y Roberto Kelly fue a pedirle la pelota a Tyler, con lo que Alex Colomé entró para tratar de darle un relevo efectivo a los Fantasmas Grises. Pareció tener un efecto positivo al recetarle el chocolate a Aquino, pero un balk comprometió al equipo con corredores en la intermedia y la antesala. Ornelas no perdonó y dio un elevado al que José Cardona no pudo llegar, con lo que produjo dos carreras en los spikes de Marmolejos y Pirela.
Colomé tampoco pudo y concedió un imparable a Diosbel Arias antes de cederle el montículo a Denny Roman después de solo sacar un out. El zurdo negoció el pasaporte con Mazeika y los Diablos volvieron a llenar la casa. Franklin Barreto castigó con una línea al jardín derecho y remolcó dos carreras más para la causa escarlata.
Canó también tuvo su momento de gloria al pegar su cuarto bambinazo de los playoffs y enviar a Mazeika y Barreto a la caja registradora. Kevin Kelly entró como cuarto relevista y fue quien sacó el out que le puso fin a la pesadilla de los Sultanes: los Diablos ya lo ganaban con 12 carreras sin respuesta.
Un jonrón de Ornelas en el sexto inning aumentó la ventaja a dos y los Rojos le llenaron las bases a Kelly, que le entregó la pelota a Edwin Escobar y cuyos tres pelotazos consecutivos en el séptimo capítulo provocaron la decimoquinta carrera del México. Arturo Roque relevó con poco éxito, al ser castigado con las dos rayitas finales. El México está a la mitad de la faena; Monterrey con la obligación de defender su casa.
AVV