Comenzó a los 8 años como una diversión, después se convirtió en el deseo de trascender y terminó siendo una carrera como beisbolista profesional que este jueves será inmortalizada en el Salón de la Fama del Beisbol Mexicano.
José Luis Borrego Sandoval entrará al Recinto de los Inmortales que se encuentra en Monterrey, al formar parte de la Generación 2020, un paso que dio después de construir un camino de 23 temporadas en la Liga Mexicana de Beisbol, 22 de esos años con los Diablos Rojos del México.
“Me siento muy emocionado desde el momento en que eligieron mi nombre al Salón de la Fama del Beisbol Mexicano y más por las personas que también van a ser entronizados, peloteros que dieron mucho al beisbol tanto en México como en Estados Unidos, como es el caso de Vinicio Castilla. Es un privilegio para mi estar en ese gran grupo con ellos”.
Después de empezar a jugar a los 8 años, Sandoval fue visto por el scout Alberto Joachín, quien lo firmó en 1987 al ver que tenía cualidades sobre el promedio. Tres años después debutó en la LMB… y en 2012 cerró una carrera en la que implantó varias marcas tanto del equipo como de la liga.
“Yo di todo en el terreno de juego sin pensar en lo que podía pasar pero hoy me doy cuenta de que valió la pena el sacrificio, el esfuerzo, la entrega de estar todos los días en el terreno de juego y darle lo mejor a esa afición que me hizo grande con su apoyo y sus aplausos. Jamás lo pensé pero ahora le doy gracias a Dios por hacerme llegar a este día tan importante”, explicó Sandoval.
El infielder debutó con la ‘Pandilla Escarlata’ en 1990, equipo con el que se mantuvo hasta 1996. Al año siguiente fue cambiado a los Saraperos de Saltillo, siendo ese 1997 el único año en que estuvo fuera de los capitalinos. Una vez que volvió, construyó su legado.
“Afortunadamente mi entrega fue total y eso hizo que los aficionados de todas las edades se fijaran en lo que hacía el ‘Borrego’ Sandoval y eso me halaga mucho, me da mucha emoción saber que lo que hice puede ser valioso o importante para personas de distintas edades y puedan seguir ese ejemplo”, continuó.
Con el México fue campeón en las temporadas de 1994, 1999, 2002, 2003 y 2008, en esta última coronación con los Diablos fue designado el Jugador Más Valioso de la Serie Final. Además, también fue campeón con los Diablos Rojos en el 2014 siendo parte del staff de coacheo.
“Ya tengo mi discurso listo. Nos van a dar como cuatro minutos y ya estoy listo. Ahí voy a agradecer a todos los que me ayudaron a lo largo de mi carrera, a todos los que estuvieron a mi lado en los momentos buenos y malos”, dijo.
“El Borrego” fue elegido como parte de una generación en la que estarán Matías Carrillo (52 votos), Vinicio Castilla (44), Isidro Márquez (40) y Eduardo Jiménez (23), pelotero que, como él, marcaron una época, algo que el propio Sandoval se puso como objetivo desde que salió de su casa a los 17 años.
“Yo salí muy chico de mi casa y por eso yo quería ser alguien en la vida, quería entregarle algo a mis papás y salí a probar para buscar lo mejor. Gracias a Dios lo logré y eso fue lo que me ayudó a ser fuerte y dejar a tantas personas, que me amaban”, sentenció.
MGC