Benjamín Gil, acostumbrado a la postemporada

En 10 temporadas como mánager se ha metido a la pelea por el título en ocho ocasiones, cinco finales y consiguió cuatro títulos

Benjamín Gil, manager de Charros de Jalisco. (Cortesía)
Vanessa Flores
Guadalajara /

Benjamín Gil suma un nuevo reto de postemporada a su recorrido profesional, en la presente campaña cumple diez años desde que comenzó su trayectoria como manejador en la Liga Mexicana del Pacífico, camino en el que ha disputado ocho postemporadas entre Tomateros de Culiacán y Charros de Jalisco.

Fue Culiacán el primer equipo que apostó por Gil como estratega, encomienda a la que el tijuanense respondió con resultados llevando al equipo a la obtención de su primer campeonato, y como el destino es caprichoso, fue esa misma campaña, la 2014-2015 cuando los Charros regresaron al circuito invernal y contra quienes peleó al tú por tú en en todo el calendario haciendo el 1 y 2 en el standing general.

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Ambos dominaron la postemporada y cinco juegos fueron suficientes para que Gil amarrara su primer título y sellara una rivalidad naciente con los albiazules a la vez que se convirtió en emblema guinda al cortar con la malaria de 11 años sin campeonatos.

La siguiente campaña fue complicada, Culiacán no pudo subir del quinto lugar y se quedó fuera de las fiestas de enero.

“El matador” supo dar la vuelta a las circunstancias y dos calendarios después, añadió el segundo trofeo a su colección.

Los reflectores se mantuvieron del lado guinda con el liderato, pero fue hasta la temporada 2019-2020 cuando Benjamín inició la hazaña que lo convirtió en histórico al conseguir el bicampeonato tras vencer a Venados y Naranjeros en cada una de las finales.

Su espíritu aguerrido lo llevó a la disputa de su tercera final consecutiva pero la vitrina no volvió a abrirse y cedió en siete juegos ante el acérrimo rival.

Los malos resultados llevaron a Culiacán al fondo del standing en el 2022, lo que finalizó la relación laboral entre Tomateros y Gil, y un año más tarde irrumpió en Jalisco a mitad del calendario llevando del fondo a la cima al equipo y metiéndolos a playoffs contra todo pronóstico, camino que finalizó tras la primera ronda.

De la mano de Gil, Charros vive una de sus mejores campañas conjuntando buen béisbol y resultados para amarrar su pase a la semifinal.

Hasta ahora el balance del tijuanense es positivo con ocho clasificaciones de diez, cinco finales y cuatro campeonatos; cifras que refrendan la confianza de Jalisco en “El Matador”.


MC

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