Las Grandes Ligas impusieron sanciones a los altos mandos de los Astros por el escándalo del robo de señales pero evitaron castigar a los jugadores de la franquicia para evitar un conflicto con la Asociación de Jugadores de Béisbol, explicó este domingo el comisionado de la MLB, Rob Manfred.
Peloteros de los Dodgers, los Yankees y los Rojos se declararon críticos con la MLB al coincidir en que los castigos debieron imponerse a toda la plantilla de la campaña victoriosa de 2017, y no solo a los directivos de la franquicia de Houston Jeff Luhnow y AJ Hinch, a quienes la oficina de Manfred suspendió por un año.
El comisionado declaró a ESPN que ante una sanción a los jugadores, estos podrían haberse defendido con el argumento de que Luhnow no les informó de un memorando que él le envió en 2017 y que aludía al uso de la tecnología.
Matizó que eso no absuelve de responsabilidad a los peloteros e los Astros.
Anunció que que establecerá nuevas reglas para controlar el uso de la tecnología antes de la temporada 2020 y que también restringirá el acceso al vídeo durante los juegos.
"Tendremos una nueva política antes de la temporada 2020. No niego que el vídeo puede ayudar a rendir si tienes acceso a él durante el juego, pero un golfista no puede salir y echar un vistazo a su 'swing'. Vamos a tener que vivir con menos acceso al vídeo en vivo dentro y alrededor del 'dugout' y la casa club".
La MLB suspendió al gerente general Jeff Luhnow y al piloto A.J. Hinch para toda la temporada 2020, despojó a la organización de cuatro selecciones de 'draft' y le multó con 5 millones de dólares, pero no le despojó del título de Serie Mundial de 2017.