El inglés Callum Smith desde pequeño había soñado con el momento de enfrentarse a un gran campeón mundial en una atmósfera de ensueño y el campeonato mundial en el 2017 reafirmó la idea de que tenía de competir en las altas esferas y demostrar que es el mejor. Ese momento ha llegado.
Con 30 años de edad y un récord invicto, el peleador de 1.90 metros de estatura se medirá este sábado en el Alamodome de San Antonio, Texas, al multimonarca mexicano Saúl Álvarez, considerado como la actual cara del boxeo.
Tranquilo y muy sonriente, el nativo de Liverpool asistió hoy a la conferencia de prensa en donde detalló lo que significa llegar justo en el momento más alto de su carrera un enfrentamiento ante el número uno libra por libra.
“Es mi momento, estoy en la posición que siempre busqué. Es la pelea más grande que puedo obtener y estoy emocionado. Definitivamente he tenido buenos momentos, momentos duros. Pero esta es una pelea que quería porque voy ante la estrella del deporte y quiero probar que puedo competir en gran nivel”, detalló el peleador que pondrá todo su futuro sobre la línea pues no sólo está su campeonato de la Asociación Mundial de Boxeo, también el cero en su récord y además la corona vacante del Consejo Mundial de Boxeo.
El equipo de Smith, encabezado por el engrenador Joe Gallagher, está consiente de que el encuentro ante Canelo no será sencillo y el récord del mexicano lo avala, pero aspiran a llevarlo a un territorio no tan conocido, ahora que ya tienen experiencia enfrentándolo.
“Será una pelea muy diferente a la que tuvimos con Liam Smith (hermano de Callum a quien Canelo venció en 2016). Será una gran victoria para Callum ahora que es un gran reto el que tenemos. Ya es momento que Canelo tenga un mal día en la oficina”, señaló Gallagher.
Resaltando las condiciones a las que el coronavirus los obligó a adaptarse, pues habrá un cupo limitado de fanáticos, el inglés lo considera una ventaja para la hora de la pelea, pues quitará un poco de presión al entrar al Alamodome.
SFRM