El youtuber estadounidense Jake Paul firmó este jueves con la promotora de artes marciales mixtas Liga Profesional de Luchadores (PFL, por sus siglas en ingles) para disputar dos peleas en 2023, una en boxeo y otra en MMA.
El menor de los hermanos Paul, que tiene 17,4 millones de seguidores solo en YouTube, militará en una nueva división bautizada como Super Fight destinada a combates con personas influyentes y famosas que tengan un cierto “nivel de destreza en el combate”.
La hoja de ruta pasa por una primera pelea de boxeo y, entre 4 y 6 meses después, hacer su debut en MMA. No se han confirmado los rivales, pero Jake Paul pide a Nate Diaz, exluchador de UFC: "Yo le daría una paliza a Nate Díaz en una pelea de MMA. No hay nada que él pudiera hacer".
"Tiene una carrera boxística en crecimiento, pero eso no le impide entrar en el deporte de la MMA, y eso nos entusiasma", aseguró Peter Murray, director ejecutivo de la promotora estadounidense.
Paul y su socio, Nakisa Bidarian, se encuentran entre los fundadores de la división y pasarán a poseer participaciones en PFL, aunque los términos económicos del acuerdo no han sido revelados.
El estadounidense ostentará también el cargo de "jefe de defensa de los luchadores" y creará contenido en redes sociales. Su socio, Bidarian -exdirector financiero de UFC-, colaborará en las labores de logística de los eventos de pago por visión.
Paul da el paso a las artes marciales mixtas tras aventurarse en el boxeo y medirse con peleadores de MMA como Ben Askren, Tyron Woodley y Anderson Silva, los dos últimos excampeones de la UFC. En esta división 'Super Fight' los luchadores se llevarán, al menos, el 50 por ciento de los pagos por visión. Los combates serán distribuidos por ESPN y DAZN
DAO