Puebla y en específico la UPAEP están de plácemes con la obtención de la medalla de bronce que la estudiante de preparatoria de las Águilas, Valeria Esperanza Mora Tovar, obtuvo junto con la Selección Nacional Mexicana, tras subir por primera vez en la historia al tercer lugar del podio dentro del Campeonato FIBA Américas de Baloncesto U16, que en días pasados se llevó a cabo en Guanajuato.
Justa en la que el combinado nacional tuvo un camino complicado rumbo al cuadro de ganadores, pues en la ronda de grupos, únicamente cosechó una victoria sobre su similar de Argentina, que al conjunto tricolor fue suficiente para avanzar a la siguiente ronda pese a sufrir par de traspiés.
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Y es que precisamente en la fase inicial, México fue presa de las quintetas de los Estados Unidos y Chile, respectivamente, lo que hizo pensar que todo había concluido ahí, pero la combinación de resultados favoreció a la escuadra nacional que caminó como la víctima a la ronda de Cuartos de Final.
Sin embargo, en dicha instancia, el espíritu guerrero del equipo las hizo salir adelante en un duelo sumamente parejo con la selección de Puerto Rico, a la que logró derrotar por apenas un punto con marcador final de 67 por 66, lo que las llevó a encarar de nueva cuenta al combinado de las Barras y las Estrellas.
Frente a Estados Unidos, ya en semifinales, el equipo mexicano no pudo cobrar revancha, y por el contrario, fueron vapuleadas por un escandaloso tanteador de 121 a 30, que si bien les impidió ir a la gran final, las dejó con la oportunidad abierta de pelear por el tercer lugar, y por ende, por el boleto al Mundial de la especialidad.
En dicha afrenta, vencieron nuevamente al equipo de Argentina por 72 a 67, lo que al plantel valió para obtener la presea de bronce, cuestión que a decir de la propia Valeria Mora, fue sin duda alguna el premio al esfuerzo realizado, tras reconocer que el nivel competitivo fue alto y que para lograr su objetivo se debieron sortear múltiples obstáculos.
"Nos costó trabajo integrarnos ya que no nos conocíamos, sólo tuvimos un mes para poder jugar y tampoco tuvimos muchos partidos de preparación. Para mí fue lo máximo, es una sensación realmente increíble porque estás en tu casa, en tu país y el saber que ganaste un lugar entre los mejores dieciséis del mundo. Poner en alto a tu país, hacer historia y portar ese jersey es un honor y un orgullo".
En ese sentido, recalcó que la mentalidad positiva, de nunca rendirse, fue algo que a ellas sacó adelante, demostrando que México tiene la capacidad y sobre todo la calidad para competir en este tipo de justas, por lo que no hay más que seguir trabajando para así llevar el nombre de México a los primeros planos.
"Creo que el básquetbol mexicano se caracteriza mucho porque somos valientes, optimistas, creo que hay disciplina sin embargo no hay constancia en el trabajo; falta mantener la intensidad en todo el partido pero lo que no nos falta es corazón y garra porque en la cancha somos siempre guerreras y guerreros", añadió.
AFM