Raheem Sterling defendió el penalti que le pitaron y que le dio la victoria a Inglaterra contra Dinamarca y dijo que fue claro.
"Entré en el área y sacó la pierna, me tocó y es un penalti claro", dijo Sterling a la cadena británica ITV.
"Ha sido una gran actuación, tuvimos que meterle mucha intensidad tras el primer gol, el primero que nos marcan en el torneo. Nos reagrupamos y mostramos un gran espíritu de equipo para remontar y ganar el partido".
"Ha sido difícil ponerse por detrás en el marcador. Tuvimos que ser pacientes, porque sabíamos que con nuestro físico, nuestra agresividad y nuestra energía, sería cuestión de tiempo que los derribáramos", añadió.
"Esto es otro paso en la buena dirección. Pero en cuanto volvamos al vestuario, se acabó, hay que concentrarse en el domingo".
eml