Si hay algo que Julio César Chávez no volvería a repetir en su vida sería volver a compartir un auto en donde al volante esté el piloto mexicano Sergio Pérez y este tuviera prisa.
Hace años, mucho antes de que el tapatío fuera el tercer lugar del Camepeonato de pilotos de la Formula 1, el piloto convivía seguido con JC Chávez, sobre todo por la amistad que tiene su padre con el Gran Campeón mexicano, y de ahí nació una bonita relación.
"Ya no he platicado mucho con él, pero una vez me subí a su carro, todavía no empezaba en la Fórmula 1", recordó para La Afición el primer mexicano tricampeón mundial. "Me paseó y me le bajé al canijo porque me dio una vuelta de 260 kilómetros por hora, una vuelta fuerte y le dije 'ya bájame a la chingada'", abundó entre risas al recordar el momento.
El sinaloense que ha sido uno de los pocos peleadores en la historia en alcanzar las 89 peleas invicto y pasó a la historia como el primer tricolor en conquistar tres divisiones diferentes, aseguró que siente una gran admiración por lo que ha hecho el piloto, “pues pone el nombre de México en alto. Da mucho orgullo ver lo que está haciendo, compitiendo ante los mejores”.
Por eso y por los años de amistad, cuando Julio César se enteró que Checo Pérez competía por la posibilidad de ser el Premio Nacional del Deporte no dudó en declarar que prefería que se lo dieran a él. Sin embargo, el 28 de noviembre ambos fueron exaltados.
FCM